En una operación conjunta, los servicios de inteligencia de las FDI, junto con el Ministerio de Defensa (la sede nacional de lucha contra el terrorismo económico) y la Autoridad Fiscal (el centro nacional de investigación de cargas), frustraron un intento de transferir fondos a la organización terrorista Hamás en Gaza, ya que los supuestos contrabandistas planeaban enviar a Hamás un enorme cargamento de barras de chocolate.
Se sabe que Hamás lleva a cabo una amplia gama de operaciones para financiar sus actividades, utilizando, entre otras cosas, envíos de productos alimenticios, incluidos los de primera necesidad, que se venden a los residentes de Gaza. Los ingresos de las ventas de alimentos se utilizan después para financiar las operaciones terroristas de Hamás en Gaza.
Las fuerzas de seguridad israelíes han intensificado recientemente la vigilancia y la aplicación de las importaciones a Gaza y han centrado su atención en varios importadores árabes, que han estado vinculados a la organización terrorista y han sido declarados infractores de la ley. Ahora se les impondrán fuertes sanciones.
Utilizando fuentes de inteligencia, Israel ha logrado recientemente frustrar varios intentos de financiar organizaciones terroristas a través de la importación de alimentos, confiscando los artículos alimenticios en cuestión tras haber sido autorizado a hacerlo mediante una orden administrativa firmada por el ministro de Defensa, Benny Gantz.
Comentando el éxito de la operación, Gantz dijo: “Israel seguirá actuando para impedir que Hamás se rearme. Hamás intenta continuamente aumentar sus capacidades militares en lugar de preocuparse por el bienestar de los residentes de Gaza que viven en condiciones económicamente difíciles. Seguiremos persiguiendo las fuentes de financiación de los terroristas, sean cuales sean”.