BEIRUT – La Armada libanesa rescató una embarcación con inmigrantes que había salido del país en dirección al oeste por el Mediterráneo, pero que se averió frente a la costa, según informó el sábado la oficina del primer ministro.
Se trata del último caso de personas desesperadas -en su mayoría libaneses, sirios y palestinos- que navegan hacia Chipre, miembro de la Unión Europea, y a veces hacia Turquía, buscando escapar de la creciente crisis económica del Líbano. Alrededor del 75% del país vive ahora en la pobreza.
La oficina del primer ministro libanés, Najib Mikati, dijo que los inmigrantes habían abandonado el Líbano ilegalmente y que la marina estaba remolcando el barco hacia la costa. No dijo cuántos migrantes había a bordo, pero dijo que algunos eran niños.
Añadió que se investigaría el incidente. Los contrabandistas en Líbano han hecho un negocio de la venta de pasajes a Europa por miles de dólares por persona.
El viernes, las Fuerzas de Seguridad Interna irrumpieron en un balneario de la ciudad septentrional de Qalamoun, donde frustraron un intento de contrabando de 82 hombres, mujeres y niños a Europa. La policía dijo que los pasajeros habían pagado 5.000 dólares por persona y que habían detenido a uno de los contrabandistas.
Chipre, miembro de la UE, se encuentra a unos 172 kilómetros de la ciudad septentrional de Trípoli, la segunda más grande del Líbano.
El año pasado, varios ciudadanos libaneses se ahogaron en el Mediterráneo cuando intentaban llegar a Europa. Cientos han sido rescatados desde que comenzó la crisis económica del Líbano a finales de 2019.
Decenas de miles de personas han perdido sus puestos de trabajo en la crisis, que ha hecho que la moneda local pierda más del 90% de su valor. El Banco Mundial dice que la crisis económica de Líbano está entre las peores que el mundo ha presenciado en más de un siglo.
En Líbano viven seis millones de personas, entre ellas un millón de refugiados sirios.