Líbano refutó el lunes las afirmaciones de que pagaría cánones a Israel a cambio del acceso a los disputados recursos de gas en el marco de un acuerdo marítimo con el Estado judío con la mediación de Estados Unidos.
En una entrevista concedida el lunes a la cadena de televisión Al-Mayadeen, el vicepresidente del Parlamento, Elias Bou Saab, que ha participado en las negociaciones marítimas, afirmó que Israel ha hecho concesiones más importantes que su vecino del norte, lo que también ha reconocido el gobierno israelí.
“Líbano no pagará regalías al adversario israelí”, prometió Saab.
El presidente de Líbano, Michel Aoun, declaró a los ciudadanos libaneses que “no habrá ninguna relación con la parte israelí”, haciendo afirmaciones idénticas a las de Saab.
Los pagos de royalties libaneses al Estado judío, según el primer ministro Yair Lapid, se anunciaron el lunes.
El primer ministro afirmó que Israel recibe todos los requisitos de seguridad, todo el Karish, e incluso algunos de los ingresos de la reserva libanesa.

Tras años de negociaciones informales, el estadounidense Amos Hochstein presentó a las autoridades libanesas e israelíes un proyecto de acuerdo que intenta resolver las reclamaciones conflictivas sobre los activos de gas en alta mar.
El ambiente es muy favorable y Líbano no renunciará a ninguno de sus derechos, dijo Saab, quien añadió que prevé que Líbano entregará sus “observaciones” sobre el contrato propuesto en las próximas 48 horas. “Tenemos que revisar el texto que nos han presentado”, añadió Saab.
Durante una conferencia de prensa que se interrumpió brevemente debido a un corte de electricidad que afectó al Parlamento libanés, Saab también habló del posible acuerdo.
Debido a la reciente crisis económica del Líbano, en 2021 se producirá un apagón estatal de 24 horas cuando las centrales eléctricas del país se queden sin gasóleo.
Se dice que los libaneses se han visto obligados a volver a la mesa de negociaciones como consecuencia de la crisis económica.
Aunque hay pocos detalles sobre el contenido del acuerdo, en Israel ya se ha iniciado un acalorado debate sobre el mismo. Benjamin Netanyahu y otras figuras de la oposición han criticado a Lapid por ceder territorio israelí y han argumentado que un primer ministro interino no debería firmar acuerdos tan importantes tan pronto antes de unas elecciones.
Los intereses de seguridad de Israel se basan en el acuerdo, dijo un alto funcionario israelí a los periodistas el domingo. Según los términos del acuerdo, el funcionario, que habló bajo condición de anonimato, declaró que el reconocimiento libanés de una fila de boyas “permitiría a Israel tratarla como su frontera territorial norte”.
Tras su salida del Líbano en mayo de 2000, Israel desplegó las boyas. La línea delimitaba el perímetro de la zona de operaciones permitida unilateralmente por Israel.
El funcionario declaró que la línea de boyas era un componente esencial de la seguridad israelí que nunca había recibido aprobación externa.
Israel y Líbano están formalmente en guerra, y las Naciones Unidas se encargan de vigilar su frontera terrestre compartida.