El lunes, el sistema judicial estadounidense presentó acusaciones de cabildeo encubierto y tráfico de armas contra Gal Luft, un analista estadounidense-israelí que ha denunciado corrupción en el círculo familiar del presidente Joe Biden.
Cargos contra Gal Luft por violar leyes y sanciones
Los fiscales en Nueva York consideran a Luft, líder de un think tank en la periferia de Washington, D.C., partícipe en múltiples planes delictivos graves. El analista enfrenta una serie de acusaciones relacionadas con la violación de la Ley de Registro de Agentes Extranjeros (FARA), tráfico de armas, violación de las sanciones contra Irán y hacer declaraciones falsas a agentes federales.
Las autoridades sostienen que Luft actuó a favor de las políticas chinas mediante un exfuncionario de alto rango del gobierno estadounidense. Este hecho sería una violación a la Ley FARA. Además, acusan a Luft de involucrarse en tratos clandestinos para armas y petróleo iraní y de mentir a los cuerpos de seguridad sobre sus acciones ilegales.
Luft ha presentado acusaciones de corrupción contra la familia de Biden. Por su parte, los políticos republicanos ven las acusaciones contra Luft como una intimidación a un testigo clave.
Luft acusado de intermediario de acuerdos armamentísticos
Las autoridades alegan que Luft facilitó un acuerdo para que empresas chinas vendieran armas a Libia a cambio de una comisión. En sus conversaciones, Luft y sus socios codificaban sus palabras y llamaban a las armas “juguetes”.
Se le atribuyen otras operaciones de intermediación que implican posibles acuerdos con los Emiratos Árabes Unidos, incluyendo bombas aéreas y cohetes. Asimismo, se le acusa de facilitar la venta de armas chinas a Kenia, como drones de ataque.
Otra de las acusaciones indica que Luft habría planeado la intermediación de una venta de armas a Qatar. Supuestamente, Luft mencionó que Israel no sería un buen intermediario para este trato, dado que posee el mismo problema que los qataríes tienen con los estadounidenses.
Gal Luft aportó pruebas sobre corrupción de los Biden

Gal Luft, de 57 años, fue arrestado en Chipre en febrero acusado por Estados Unidos. Sin embargo, huyó luego de ser liberado bajo fianza, mientras esperaba el procedimiento de extradición. Actualmente, Luft está prófugo y el Departamento de Justicia de Estados Unidos solicita información sobre su ubicación.
Una cuenta de Twitter a nombre de Luft ha declarado que su arresto en Chipre fue motivado por una petición política de extradición por parte de Estados Unidos. Además, ha negado ser un traficante de armas.
En un video publicado recientemente, Luft asegura haber aportado evidencia sobre transacciones financieras corruptas de la familia Biden con la empresa energética china CEFC en 2019. Afirma que esta información fue posteriormente encubierta.
Repercusiones políticas de las acusaciones contra Luft
El senador republicano Ron Johnson ha acusado al gobierno de encubrir la información presentada por Luft. Frank Gaffney, presidente ejecutivo del think tank Center for Security Policy, ha expresado su apoyo a Luft esta semana, comparándolo con el bíblico David enfrentando solo a Goliat.
Con Biden buscando un segundo mandato como presidente en las elecciones de 2024, los republicanos han acusado a la familia Biden de lucrarse con empresas chinas y rumanas. En este contexto, las denuncias de Luft sobre la corrupción de la familia Biden adquieren relevancia.
El Instituto para el Análisis de la Seguridad Global no ha respondido a las solicitudes de comentarios de los medios de comunicación.