La preocupación por los residentes australianos en Oriente Próximo ha llevado a Australia a anunciar que enviará tropas y dos aviones de transporte militar a la región.
Richard Marles, ministro de Defensa, ha dicho que se va a enviar un “número significativo” de tropas, aunque no ha especificado cuántas. También se han enviado dos aviones C-130J Super Hercules.
Marles, que también es Viceprimer ministro, se negó a revelar la ubicación de las bases de los aviones y las tropas.
Otros dos aviones, un C-17A Globemaster y un KC-30 de reabastecimiento aéreo, se unirán a la flota.
“El objetivo de esto es proporcionar apoyo a las poblaciones australianas que están en Oriente Medio si esto empeora”, dice Marles a ABC.
El 7 de octubre, hombres armados del grupo terrorista palestino Hamás asaltaron la valla fronteriza entre la Franja de Gaza e Israel, matando a 1.400 personas —en su mayoría civiles, pero también ciudadanos australianos—, torturando y mutilando a cientos más, y secuestrando a más de 200 para desencadenar una guerra a gran escala entre los dos países.
Israel declaró su intención de derrocar y destruir al grupo terrorista que gobierna la Franja e inició intensos bombardeos antes de una esperada ofensiva terrestre. Según cifras no verificadas de Hamás, miles de personas han muerto en los ataques contra Gaza, aunque no está claro cuántos de ellos son sus operativos.
Desde el 13 de octubre, más de 800 australianos han sido evacuados de Israel.
El gobierno australiano, según Marles, está ayudando a los 79 ciudadanos australianos en Gaza y a los 51 ciudadanos australianos en Judea y Samaria que han solicitado marcharse.
Las fuerzas australianas llevan décadas presentes en Oriente Próximo.
Envía tropas de combate a Irak y Siria para ayudar a formar a las fuerzas de seguridad iraquíes en la lucha contra el Estado Islámico.