En entrevistas con el New York Times, los altos mandos de Hamás afirman que su objetivo con los atentados del 7 de octubre era “cambiar toda la ecuación” y renovar la atención sobre la causa palestina, en palabras de Khalil al-Hayya, miembro del politburó del grupo terrorista en Qatar.
“Lo que podía cambiar la ecuación era un gran acto y, sin duda, se sabía que la reacción a este gran acto sería grande”, afirma. “Teníamos que decirle a la gente que la causa palestina no moriría”.
Al-Hayya y otros miembros de Hamás citados descartan la idea de que quieran gobernar Gaza, expresando, en cambio, su apoyo a un conflicto sin fin.
“Espero que el estado de guerra con Israel se convierta en permanente en todas las fronteras y que el mundo árabe nos apoye”, declaró al periódico Taher El-Nounou, asesor de medios de Hamás.
“El objetivo de Hamás no es dirigir Gaza y llevarle agua y electricidad y cosas así”, afirma al-Hayya.
“Esta batalla no fue porque quisiéramos combustible o trabajadores”, añade. “No buscaba mejorar la situación de Gaza. Esta batalla es para derrocar completamente la situación”.