El grupo terrorista Hamás afirma que el envío de un barco de ayuda desde Chipre al territorio es una respuesta inadecuada a las necesidades de sus 2,4 millones de habitantes.
“Según lo anunciado, la carga del barco no supera la de uno o dos camiones, y tardará días en llegar”, afirma Salama Marouf, un portavoz, en un comunicado.
Afirma que algunas preguntas logísticas sobre la operación quedaron sin respuesta y plantearon dudas sobre las inspecciones israelíes.
“Todavía se desconoce dónde atracará y cómo llegará a las costas de Gaza”, afirma Marouf. “Además, será objeto de inspección por parte del ejército de ocupación”.
Un antiguo buque de salvamento gestionado por la organización benéfica española Open Arms partió de Chipre a primera hora del martes remolcando una barcaza cargada con 200 toneladas de ayuda en una prueba del corredor marítimo.
El miércoles, el buque aún no había completado la travesía de casi 400 kilómetros (250 millas) por el Mediterráneo oriental hasta Gaza, donde la organización benéfica estadounidense World Central Kitchen dijo que se estaba trabajando para construir un embarcadero improvisado.