Los principales jefes de seguridad de Israel han expresado su respaldo a una retirada completa de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) de la Franja de Gaza en las primeras seis semanas tras un posible acuerdo de tregua e intercambio de rehenes con Hamás, según informó la emisora pública Kan.
El ministro de Defensa, Yoav Gallant, el jefe del Estado Mayor de las FDI, Herzi Halevi, el director del Mossad, David Barnea, y el jefe del Shin Bet, Ronen Bar, informaron al primer ministro, Benjamin Netanyahu, que apoyan tal acuerdo. Argumentaron que el breve periodo no permitiría a Hamás reagruparse y rearmarse significativamente.
“Somos conscientes de las ramificaciones de seguridad, pero este es el momento de priorizar la liberación de los rehenes, cuyo tiempo es limitado”, indicaron al primer ministro, según el informe. Añadieron que su posición considera aspectos como el control del Corredor Filadelfia, en la frontera entre Gaza y Egipto, y el retorno de los habitantes y agentes terroristas al norte de Gaza.
El Canal 12 de noticias reportó detalles similares, mencionando que Netanyahu rechazó la flexibilidad propuesta por los jefes de seguridad durante una extensa discusión ayer.
Halevi le manifestó al primer ministro: “Sabremos cómo crear toda la flexibilidad necesaria para cumplir con los términos del acuerdo. Este es el momento de combinar la presión militar y las negociaciones y ver cómo avanzar hacia un acuerdo”.
Según el canal, Netanyahu se ha mantenido firme en sus demandas, que se reflejarán en la respuesta que Israel dará a los mediadores cuando se reanuden las conversaciones el jueves, aunque existe la posibilidad de que Hamás rechace el acuerdo.
Se espera que la delegación que retome las conversaciones esté compuesta por un equipo de trabajo sin funcionarios de alto nivel, aunque esto podría cambiar, según el informe.