El grupo terrorista Hezbolá ha anunciado la muerte de tres de sus miembros, asesinados “en el camino a Jerusalén”, término que utilizan para referirse a operativos caídos en ataques israelíes.
Este anuncio se produce tras un ataque aéreo israelí en un depósito de armas en Kafr Kila, al sur del Líbano, donde, según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), se avistaron varios operativos de Hezbolá. Los muertos han sido identificados como Ahmed Musa de Ali al-Nahri, Muhammad Marish de Beirut y Naeem Farhat de Beit Shama. Con estas muertes, el número total de miembros de Hezbolá muertos desde el inicio de la guerra en la Franja de Gaza asciende a al menos 380.
El ataque aéreo fue llevado a cabo después de que las tropas de la Unidad de Recopilación de Inteligencia de Combate 869 de las FDI identificaran a los agentes ingresando en el depósito de armas. Poco después, aviones de combate israelíes realizaron el ataque.
Simultáneamente, Hezbolá lanzó dos drones cargados de explosivos esta tarde. Las FDI informaron que uno de los drones fue derribado sobre el norte de Israel, mientras que el segundo impactó en la zona de Yiftah sin causar heridos. Hezbolá declaró que el objetivo de los drones era una posición militar israelí.
Además, dos cohetes fueron lanzados desde el Líbano y cayeron en la zona de Shtula, también sin causar heridos, según informaron las FDI.