Hamás no anticipó el regreso de Israel a la ofensiva terrestre, según altos mandos del Comando Sur de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). La organización islamista había asumido que la guerra había concluido y que no se reanudarían los combates, lo que provocó que el nuevo ataque los encontrara desprevenidos.
Desde fuentes militares se informó que el enemigo no esperaba la iniciativa ni la intensidad del fuego desplegado. Las FDI confirmaron que la sorpresa fue total debido a la falsa percepción de Hamás sobre el fin de la guerra.
Los operativos y líderes de Hamás han sido detectados ocultos en escuelas y hospitales, de acuerdo con inteligencia militar. Durante el avance terrestre, las tropas destruyeron túneles a un kilómetro de profundidad, y las operaciones continúan con la detección y el mapeo de la infraestructura terrorista.
En la zona norte de la Franja de Gaza, las tropas israelíes hallaron cinco túneles que se extendían hasta la valla fronteriza. Las actuales operaciones se concentran en Shejaiya y Daraj Tufah, en un terreno elevado cercano al mar, al tiempo que otras unidades actúan entre el Corredor de Netzarim y el de Saladino.
La Fuerza Aérea israelí ha impactado 1200 blancos vinculados a Hamás. Los objetivos incluyen comandantes de diferentes rangos, arsenales, talleres de armas, lanzadores y fosas de lanzamiento. Las FDI informaron que hasta ahora han eliminado a 350 terroristas, entre ellos siete comandantes de batallón, 11 de compañía y alrededor de 40 figuras clave en inteligencia y gobierno, junto con 12 objetivos estratégicos del aparato estatal de Hamás.
Sobre el plano humanitario, los responsables militares aseguran que monitorean con atención la situación dentro de Gaza. Afirmaron que existen suficientes reservas de alimentos y negaron la existencia de una hambruna.