La Operación Noble Eagle emplea al F-22 para interceptar aviones rusos y chinos en la ADIZ de Alaska como parte de la defensa aérea nacional.
F-22 refuerza la defensa aérea nacional desde la Operación Noble Eagle
El 11 de septiembre de 2001 marcó el inicio de la Operación Noble Eagle, implementada tras los atentados en Estados Unidos para reforzar la vigilancia del espacio aéreo nacional. Desde entonces, esta operación del Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte (NORAD) ha priorizado la identificación e intercepción de aeronaves que representen amenazas cerca del territorio continental.
El F-22 Raptor, fabricado por Lockheed Martin, ha sido un recurso fundamental desde los primeros años de la operación. Este caza de quinta generación ha asumido un rol protagónico en la defensa aérea sobre la Zona de Identificación de Defensa Aérea (ADIZ) de Alaska, particularmente frente a aproximaciones de aviones rusos y chinos. Su despliegue responde a necesidades tácticas más que ofensivas.
Originalmente concebida como una respuesta ante amenazas asimétricas, la operación reorganizó la estructura defensiva de NORAD. Miles de miembros de la Guardia Nacional y reservistas reforzaron instalaciones estratégicas y aeropuertos. A pesar de estos despliegues terrestres, el aspecto más visible ha sido el patrullaje aéreo y la intercepción de aeronaves que ingresan sin identificación en la ADIZ.
Desde diciembre de 2005, el F-22 ha demostrado ser una plataforma adecuada para estas tareas. Aunque diseñado para obtener superioridad aérea en conflictos globales, su velocidad sin posquemador, discreción radar y sensores integrados lo hacen eficaz para interceptar y escoltar aviones en escenarios de defensa nacional. En este contexto, su función difiere completamente de su uso en operaciones de ataque como en Siria.
Casos documentados de intercepciones del F-22 en la ADIZ de Alaska
- Noviembre de 2007: primera intercepción de Tu-95 rusos por F-22 del 90.º Escuadrón en Alaska.
- 11 de septiembre de 2018: F-22 identifican Tu-95 y Su-35 a 200 millas de la costa.
- 10 de junio de 2020: dos formaciones rusas interceptadas a 20 y 32 millas náuticas.
- 19 de octubre de 2020: F-22 interceptan aviones rusos que maniobraban dentro de la ADIZ.
- 24 de julio de 2024: primera intercepción conjunta de bombarderos rusos y chinos.
- 23 de septiembre de 2024: F-16 y F-22 responden ante patrullas rusas marítimas.
- Febrero de 2023: F-22 derriban un globo chino y un objeto no identificado.
F-22 interceptó aviones rusos por primera vez en noviembre de 2007
Una de las primeras intercepciones realizadas por el F-22 ocurrió en noviembre de 2007, cuando dos Tu-95MS rusos se acercaron a Alaska. Los cazas, pertenecientes al 90.º Escuadrón y desplegados desde la Base Elmendorf, los identificaron con apoyo de E-3 AWACS y KC-135 Stratotanker. Los bombarderos permanecieron en espacio internacional, sin violar territorio soberano.
Las incursiones rusas en la ADIZ de Alaska se repitieron en años posteriores, especialmente sobre el Mar de Bering, donde la cercanía con Rusia exige vigilancia constante. El 11 de septiembre de 2018, dos F-22 interceptaron una formación rusa integrada por Tu-95, Su-35 y un A-50 a 200 millas de la costa. NORAD reportó que la respuesta fue rápida y precisa, sin incidentes.
Durante 2020, el número de incursiones rusas en la ADIZ aumentó. El 10 de junio de ese año, NORAD ejecutó dos intercepciones consecutivas: una a 20 millas náuticas y otra a 32. Ambas formaciones incluían bombarderos Tu-95, Su-35 y A-50. El general Terrence J. O’Shaughnessy subrayó la operatividad constante de NORAD, disponible los 365 días del año.
El 19 de octubre de 2020, otra formación rusa compuesta por Tu-95, Su-35 y un A-50 se aproximó a 30 millas de la costa. NORAD indicó que los aviones permanecieron en la ADIZ para evaluar los tiempos de respuesta y alcance de radar. La operación exigió coordinación entre cazas, aeronaves de apoyo y sistemas terrestres, consolidando el rol del F-22 en la defensa nacional.
Fuerza Aérea interceptó aviones chinos por primera vez en 2024
En julio de 2024, NORAD registró la primera incursión conjunta de aeronaves chinas y rusas en la ADIZ de Alaska. La formación incluyó dos H-6 chinos y dos Tu-95 rusos. Los F-22, en coordinación con CF-18 canadienses, interceptaron la formación, que permaneció fuera del espacio aéreo soberano. Este evento reflejó el aumento de la actividad china en el Ártico.
Otro episodio relevante ocurrió el 23 de septiembre de 2024. NORAD interceptó cuatro aviones rusos, entre ellos un Tu-142 y dos Il-38 de patrulla marítima. Aunque los principales interceptores fueron F-16, el F-22 también participa regularmente en estas misiones debido a su proximidad geográfica y su adaptabilidad a las condiciones árticas.
Las patrullas aéreas rusas, que a menudo superan las 11 horas de vuelo, siguen siendo frecuentes. Estos vuelos suelen incluir escoltas de Su-30 o Su-35, obligando a mantener a los F-22 en alerta permanente. NORAD considera estas operaciones como parte de una rutina estratégica que exige vigilancia continua.
En febrero de 2023, el F-22 amplió su espectro operativo al derribar un globo de vigilancia chino sobre el océano Atlántico con un misil AIM-9X Sidewinder. Días después, otro F-22 eliminó un objeto volador no identificado en Alaska, a 40,000 pies de altura. Estas acciones destacaron su capacidad para actuar ante amenazas no convencionales.
F-22 destaca como activo táctico para misiones de respuesta rápida
El despliegue táctico del F-22 en misiones de intercepción responde a sus capacidades únicas. Su velocidad supersónica y su habilidad para operar a gran altitud le permiten cubrir extensas áreas de la ADIZ de Alaska con rapidez. Aunque su furtividad es menos efectiva ante radares de baja frecuencia, sí complica su localización para las aeronaves extranjeras.
Su sistema de aviónica avanzada fusiona datos de sensores internos y externos, lo que otorga al piloto una imagen táctica consolidada. Esta tecnología facilita la toma de decisiones bajo presión y reduce la carga operativa en misiones de intercepción. El F-22 mantiene siempre una postura no agresiva, ejecutando identificaciones visuales sin provocar incidentes.
Las intercepciones no se limitan a aeronaves militares. El derribo de un globo chino en 2023 y otro objeto en el espacio aéreo ártico demostró su flexibilidad operativa. Estas misiones refuerzan el concepto de defensa aérea integral que NORAD ejecuta bajo el marco de la Operación Noble Eagle.
En situaciones complejas, el F-22 opera en conjunto con cisternas KC-135 y aviones E-3 AWACS. Estos recursos extienden su autonomía y proporcionan datos en tiempo real. La red de vigilancia que incluye radares terrestres y satélites asegura una respuesta eficaz ante cualquier incursión.
Actividad aérea de Rusia y China consolida el rol del F-22 en NORAD
La evolución de la Operación Noble Eagle, de contingencia a misión permanente, ha consolidado al F-22 como componente clave de la defensa aérea estadounidense. Las intercepciones en la ADIZ, especialmente desde 2015, revelan la creciente relevancia estratégica del Ártico.
En 2021, el teniente general David Krumm, comandante de la región de Alaska de NORAD, confirmó más de 60 intercepciones de aviones rusos en un solo año, el número más alto desde la Guerra Fría. Esta tendencia ha exigido una alta disponibilidad operativa de los F-22 desplegados en la región.
La frecuencia de las misiones ha presionado a las unidades aéreas de Alaska, pero el Raptor ha demostrado ser confiable y eficiente. Su capacidad para actuar bajo condiciones climáticas adversas y su rápida respuesta lo mantienen como plataforma indispensable en la región.
Cada intercepción refleja la interacción de múltiples elementos: vigilancia satelital, sistemas radar, pilotos entrenados bajo reglas estrictas de enfrentamiento y plataformas aéreas de alta tecnología. Esta coordinación ha permitido a NORAD minimizar riesgos y mantener el control del espacio aéreo ante provocaciones rusas o chinas.