Médicos Sin Fronteras (MSF) denuncia que la cantidad de ayuda humanitaria que Israel autoriza para ingresar a la Franja de Gaza, afectada por la guerra, resulta insuficiente. El grupo califica esta medida como una estrategia para aparentar que el asedio concluyó, sin abordar la crisis real.
Pascale Coissard, coordinadora de emergencias de MSF en Jan Yunis, Gaza, afirma que las autoridades israelíes permiten una cantidad mínima de ayuda tras meses de un bloqueo severo. Esta acción busca evitar acusaciones de inducir hambruna, mientras mantiene a la población en condiciones de supervivencia precaria.
Ayer, Israel otorgó permiso para que 93 camiones con asistencia humanitaria entraran a Gaza, según Naciones Unidas. La decisión responde a la creciente presión internacional para que el gobierno alivie los efectos de un bloqueo de 11 semanas, finalizado el lunes.
Desde el 2 de marzo, Israel impidió el ingreso de ayuda a Gaza, justificando que durante un cese al fuego de seis semanas entró suficiente asistencia, pero Hamás la robaba. Además, argumenta que el bloqueo presiona al grupo terrorista para liberar a decenas de rehenes retenidos.
Recientemente, algunos oficiales de las Fuerzas de Defensa de Israel alertaron a líderes políticos sobre el riesgo de inanición en el enclave, lo que evidencia la gravedad de la situación humanitaria.