Rusia reubica bombarderos Tu-160 en Anadyr, a 500 km de Alaska, para protegerlos de drones ucranianos, según imágenes satelitales.
Redespliegue de bombarderos Tu-160 en base rusa de Anadyr
Rusia trasladó bombarderos estratégicos Tu-160, conocidos por la OTAN como “Blackjack”, a la base aérea de Anadyr, en el extremo oriental de Siberia, a solo 500 kilómetros de Alaska. Imágenes satelitales recientes, reportadas por Defense Express el 5 de junio de 2025, confirman la presencia de al menos dos de estos aviones en el aeródromo de Ugolny, una instalación militar remota en la región de Chukotka. Este movimiento responde a los crecientes ataques con drones ucranianos contra bases aéreas rusas, que han causado pérdidas significativas en los últimos meses.
La base de Anadyr, situada a más de 6.600 kilómetros de Ucrania, carece de acceso por carretera y depende exclusivamente de transporte aéreo y suministros marítimos estacionales. Esta ubicación estratégica, aunque logísticamente desafiante, ofrece protección contra los drones de largo alcance utilizados por Kiev en la campaña conocida como “Spider Web”, que ha dañado o destruido activos rusos en bases como Engels y Olenya.
Los ataques ucranianos han intensificado la presión sobre la flota aérea rusa. En Engels, a 700 kilómetros al sureste de Moscú, un ataque con drones en diciembre de 2024 destruyó al menos un Tu-95 y dañó instalaciones clave, según reportes de Forbes. En Olenya, en la península de Kola, otro ataque en abril de 2025 impactó un Tu-22M3, según análisis de imágenes satelitales de The War Zone. Estos incidentes han reducido la capacidad operativa de Rusia, forzando el traslado de activos a regiones menos vulnerables.
La elección de Anadyr resulta paradójica. Al posicionar los Tu-160 cerca de Alaska, Rusia los aleja del alcance de los drones ucranianos, pero los coloca bajo la vigilancia de las redes de defensa antiaérea de Estados Unidos, que incluyen radares y bases en la región. Informes de Air & Space Forces Magazine indican que el Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte (NORAD) monitorea regularmente los movimientos aéreos rusos en el estrecho de Bering, lo que sugiere que los aviones en Anadyr están bajo constante observación.
Datos clave sobre los bombarderos Tu-160 en Anadyr
- Los Tu-160 son bombarderos supersónicos con un alcance de 12.000 km sin reabastecimiento.
- Anadyr está a 500 km de Alaska, pero a 6.600 km de Ucrania, fuera del alcance de drones.
- La base de Ugolny tiene capacidad para operar hasta seis Tu-160, según Janes.
- Los Tu-160 pueden llevar hasta 12 misiles de crucero Kh-101/102, con un alcance de 2.500 km.
- Rusia posee menos de 20 Tu-160 operativos, según estimaciones de IISS en 2025.
Ataques ucranianos fuerzan cambios estratégicos de Rusia
La campaña ucraniana “Spider Web” ha utilizado drones de largo alcance, como el Pd-2 y modelos improvisados, para atacar bases aéreas rusas con precisión. Un informe de The Drive detalla que en mayo de 2025, un ataque en Dyagilevo dañó hangares y al menos un avión de reabastecimiento Il-78. Estos ataques han expuesto vulnerabilidades en las defensas antiaéreas rusas, particularmente en bases cercanas al teatro de operaciones en Ucrania. La reubicación de los Tu-160 a Anadyr busca mitigar estas amenazas, aunque a un costo logístico significativo.
El aeródromo de Ugolny enfrenta desafíos operativos. Según Global Security, la base depende de entregas marítimas estacionales para combustible y municiones, lo que limita su capacidad para sostener operaciones prolongadas. Además, el mantenimiento de los Tu-160, que requieren personal especializado y repuestos específicos, es más complejo en un lugar tan remoto. A pesar de estas dificultades, Rusia ha priorizado la protección de su flota estratégica sobre la conveniencia operativa.
Los Tu-160 han incrementado su actividad en 2025. Datos de Ukrainian Military Center confirman que estos bombarderos realizaron lanzamientos de misiles de crucero el 26 de mayo y el 6 de junio de 2025 contra objetivos en Ucrania. Inteligencia de fuentes abiertas, recopilada por OSINTtechnical, sugiere que Rusia planea otro ataque con misiles entre el 9 y el 12 de junio, utilizando los Tu-160 desde bases seguras como Anadyr.
La reubicación también tiene implicaciones geopolíticas. Al mover los Tu-160 cerca del espacio aéreo de Estados Unidos, Rusia acepta el riesgo de una mayor vigilancia por parte de NORAD y la Fuerza Aérea de EE. UU., que han interceptado bombarderos rusos en la Zona de Identificación de defensa antiaérea de Alaska en múltiples ocasiones desde 2020, según CNN. Sin embargo, la distancia de Anadyr a Ucrania garantiza que los drones enemigos no puedan alcanzar estos activos clave.
Contexto estratégico de los Tu-160 en la guerra
Los Tu-160 son un componente crítico de la tríada nuclear rusa, diseñados para lanzar misiles de crucero con capacidad nuclear o convencional. Su despliegue en Anadyr subraya la preocupación de Moscú por preservar su capacidad de disuasión estratégica, incluso en medio de pérdidas en la guerra con Ucrania. Según The National Interest, Rusia ha perdido al menos cinco bombarderos estratégicos desde 2022, lo que representa una reducción significativa de su flota, estimada en menos de 60 aviones de este tipo por el Stockholm International Peace Research Institute.
La base de Anadyr no es nueva en el despliegue de bombarderos. Durante la Guerra Fría, sirvió como un puesto avanzado para operaciones en el Ártico, según datos de Federation of American Scientists. Sin embargo., donde la amenaza de los drones ucranianos supera las preocupaciones tradicionales sobre la proximidad a Estados Unidos. Este movimiento también indica que Rusia está adaptando sus tácticas para contrarrestar las capacidades asimétricas de Ucrania, que han demostrado ser efectivas contra objetivos de alto valor.
El redespliegue de los Tu-160 a Anadyr protege estos aviones y también permite a Rusia mantener una postura ofensiva limitada. Los misiles Kh-101/102, lanzados desde los Tu-160, tienen un alcance suficiente para alcanzar objetivos en Ucrania desde el espacio aéreo ruso, según Missile Threat. Esto asegura que los bombarderos puedan seguir participando en la guerra sin exponerse a los ataques directos.
La decisión de Rusia de esconder sus Tu-160 cerca de Alaska destaca la complejidad del entorno estratégico actual. Mientras Moscú busca proteger sus activos más valiosos de los drones ucranianos, debe equilibrar los riesgos de operar cerca de la infraestructura militar de Estados Unidos. Este movimiento, aunque tácticamente lógico, resalta las limitaciones operativas y logísticas que enfrenta Rusia en su esfuerzo por mantener su capacidad aérea estratégica.