La dinámica de los ataques iraníes contra Israel experimentó un cambio notable en las últimas horas. En contraste con los intensos bombardeos iniciales de la guerra, que involucraron decenas de misiles balísticos y causaron víctimas y daños considerables, la ofensiva reciente se caracterizó por una reducción significativa en la frecuencia y escala.
Durante la noche, Irán ejecutó tres oleadas de ataques con misiles individuales, lo que marcó una diferencia sustancial respecto a las tácticas previas. Estas acciones, además, se distinguieron por la escasa o nula advertencia previa, lo que aumentó la tensión en las zonas objetivo.
A las 00:24, las sirenas resonaron en el centro y sur de Israel, apenas tres minutos después de que el Comando del Frente Interno emitiera una alerta temprana. Contrario a las promesas oficiales de una “preparación previa” que instaba a la población a permanecer cerca de espacios protegidos, la notificación resultó insuficiente.
La agencia de noticias “Sabrin”, vinculada a milicias proiraníes en Irak, difundió un video que mostró el lanzamiento de un misil hacia una base israelí. Según el medio, Irán empleó por primera vez misiles Qadr, de lanzamiento vertical, con un alcance de 2,000 kilómetros y una ojiva de entre 650 y 1,000 kilogramos, capaces de “desaparecer en el cielo” tras su despegue.
A las 3:27 de la madrugada, una segunda oleada impactó el centro del país. El Comando del Frente Interno emitió una alerta solo tres minutos antes, pero esta no llegó a varias zonas afectadas, incluidas Tel Aviv, Herzliya, Givatayim y diversos asentamientos en las regiones de Sharon y Gush Dan.
En este ataque, se lanzaron entre tres y cinco misiles balísticos individuales, todos interceptados por las defensas antiaéreas israelíes. La brevedad de las advertencias expuso fallos en el sistema de notificación, lo que incrementó la vulnerabilidad de los residentes.
La tercera oleada, registrada a las 4:32 en el norte, consistió en un único misil balístico. Las sirenas se activaron en Haifa, Hadera, Acre, las Kiriot y múltiples localidades de la costa norte, Galilea y los valles, apenas dos minutos después de que se emitiera la alerta temprana.
Este proyectil, también interceptado, reflejó un posible cambio táctico iraní, similar a los ataques individuales que los hutíes ejecutaron. Sin embargo, la superioridad aérea de la Fuerza Aérea israelí, que opera en el oeste de Irán, Teherán y otras áreas, pudo haber frustrado intentos de lanzamientos adicionales, lo que limitó la escala del ataque.
El ejército israelí emitió un comunicado: “Se solicita al público que cumpla con las instrucciones del Comando del Frente Interno. En este momento, la Fuerza Aérea opera para interceptar y atacar en cualquier lugar necesario para neutralizar la amenaza. La defensa no es hermética, por lo que es crucial que se sigan las instrucciones del Comando del Frente Interno”.