El profesor Shlomi Kodesh, director del Centro Médico Soroka, instó a las autoridades a implementar medidas urgentes para proteger todo el hospital contra misiles y proyectiles tras el ataque balístico ocurrido ayer.
Kodesh destacó que los planos para fortalecer el hospital existen desde hace años. “Contamos con proyectos de construcción listos; solo falta la decisión política para ejecutarlos de inmediato”, afirmó.
El ataque iraní de ayer causó daños significativos en el hospital ubicado en Beersheba. A pesar de ello, la sala de emergencias, situada en una zona protegida, continúa operativa y atiende a los residentes del Néguev sin interrupciones.
Actualmente, el hospital registra una ocupación del 23 por ciento, con 270 pacientes internados. En las últimas 24 horas, 95 personas llegaron a la sala de emergencias, todas con heridas leves o cuadros de ansiedad.
“La dedicación, profesionalismo y humanidad de nuestro equipo superan cualquier misil”, aseguró Kodesh. “Nuestro espíritu permanece intacto; nos levantaremos y reconstruiremos con determinación”.