Paraguay refuerza su defensa antiaérea con cuatro A-29 Super Tucano, adquiridos para enfrentar cárteles de drogas y aumentar el control en la frontera.
A-29 Super Tucano refuerza defensa antiaérea de Paraguay
El 30 de junio de 2025, Embraer entregó cuatro de los seis aviones A-29 Super Tucano encargados por la Fuerza Aérea Paraguaya en una ceremonia en la Base Aérea Silvio Pettirossi, cerca de Asunción. Los aviones, fabricados en Brasil, constituyen la primera compra de aeronaves de combate por parte de Paraguay desde 1987. Esta entrega mejora la capacidad para vigilar el espacio aéreo y responder ante amenazas transnacionales, con énfasis en el narcotráfico en regiones como el Gran Chaco. Los dos aviones restantes llegarán antes de enero de 2026, según lo estipulado en un contrato valuado en $105 millones.
Los A-29 Super Tucano son turbohélices de ataque ligero adaptados para misiones de apoyo aéreo cercano, patrullas fronterizas y formación avanzada. Con sensores de última tecnología y capacidad para portar municiones guiadas de precisión, estos aviones permiten a Paraguay ejercer mayor vigilancia y control sobre su espacio aéreo, especialmente en zonas expuestas al tráfico ilícito. La adquisición contempla también simuladores y soporte logístico, lo que permite mantener la operatividad de la flota.
El acuerdo fue financiado parcialmente mediante un préstamo del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil. Los pilotos paraguayos recibieron su instrucción en Brasil y trasladaron los aviones desde las instalaciones de Embraer en São Paulo hasta Asunción con escolta de la Fuerza Aérea Brasileña. Esta colaboración formaliza una coordinación regional en defensa y alinea a Paraguay con otros países sudamericanos que operan el A-29, como Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Uruguay.
La entrega ocurre en paralelo con un incremento de operaciones contra el narcotráfico en Paraguay. Los cárteles emplean aeronaves ligeras para trasladar estupefacientes por zonas de frontera poco controladas. Los A-29 Super Tucano, por su capacidad para utilizar pistas cortas y operar en entornos precarios, resultan adecuados para interceptar vuelos no autorizados y brindar cobertura aérea a unidades terrestres en misiones antidrogas. La flota se integra además en el programa de modernización, que abarca la compra de nuevos radares y la actualización de aviones de entrenamiento T-35 Pillán.
Datos clave sobre el A-29 Super Tucano en Paraguay
- Costo total: $105 millones por seis aviones, con financiamiento parcial de Brasil.
- Entrega: Cuatro aviones entregados el 30 de junio de 2025; dos adicionales se prevén antes de enero de 2026.
- Capacidades: Sensores avanzados, municiones guiadas de precisión, adecuados para patrullaje y misiones de apoyo aéreo.
- Entrenamiento: Pilotos paraguayos formados en Brasil; ocho más continúan en instrucción.
- Impacto regional: Paraguay se incorpora al grupo de operadores del A-29 junto con Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Uruguay.
Uso del A-29 Super Tucano contra redes de narcotráfico
El A-29 Super Tucano ha sido utilizado en otros países para enfrentar el narcotráfico. Brasil, con más de 90 unidades, lo emplea para vigilar sus fronteras y frenar el tráfico de estupefacientes. Colombia lo ha utilizado en operaciones contra grupos insurgentes y redes criminales. Su capacidad para ejecutar misiones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR), junto a un costo operativo menor en comparación con cazas como el F-35 —cuyo valor supera los 30,000 dólares por hora de vuelo—, lo convierte en una herramienta viable para las capacidades presupuestarias de Paraguay.
La incorporación del A-29 responde a la necesidad de interceptar vuelos ilícitos en el Gran Chaco, una zona de difícil acceso empleada por organizaciones narcotraficantes. En 2024, Paraguay reportó mayores incautaciones de cocaína y marihuana, superando las 10 toneladas en operaciones binacionales con Brasil. El A-29 permitirá enfrentar estas amenazas desde el aire y reforzar a las fuerzas de seguridad internas, lo cual reduce la necesidad de asistencia exterior.
La modernización de la Fuerza Aérea Paraguaya también incluye obras de infraestructura. Un nuevo Parque de Abastecimiento en la Base Aérea Silvio Pettirossi provee los materiales necesarios para realizar el mantenimiento del A-29 y de los modelos AT-27 Tucano. Esta inversión permite sostener la operatividad, aunque aún persisten limitaciones asociadas con la disponibilidad de repuestos y la formación técnica continua del personal de mantenimiento.
La incorporación de los A-29 Super Tucano refuerza las capacidades aéreas de Paraguay para realizar misiones de vigilancia y control territorial. La compatibilidad del A-29 con los sistemas usados por otras fuerzas aéreas sudamericanas facilita ejercicios conjuntos e intercambio técnico con fines operativos. Asimismo, el uso de proveedores regionales como Embraer limita la necesidad de involucrar a potencias extrarregionales como China, cuya presencia económica se ha incrementado en América Latina.
Cooperación con Brasil en el marco de seguridad regional
La entrega de los A-29 Super Tucano reafirma la cooperación entre Paraguay y Brasil, que posee la mayor flota de este modelo. En 2024, Uruguay firmó un acuerdo para adquirir hasta seis A-29, mientras que Panamá manifestó interés por cuatro unidades.
Los A-29 paraguayos poseen la configuración más reciente del modelo, que incluye sistemas de navegación optimizados y capacidad para vuelos nocturnos. Estas funciones hacen posible realizar misiones de larga duración en zonas remotas, lo cual resulta útil para patrullar las fronteras con Bolivia y Argentina, donde persisten actividades vinculadas al narcotráfico. En 2025, el modelo acumuló 600,000 horas de vuelo a nivel mundial.
La Fuerza Aérea Paraguaya tiene previsto presentar públicamente los A-29 con el fin de promover la rendición de cuentas y generar respaldo a las políticas de defensa. El programa de modernización también incluye el reacondicionamiento de los AT-27 Tucano, que seguirán operando en tareas de patrullaje y entrenamiento. Sin embargo, el mantenimiento de esta flota dependerá de la disponibilidad de fondos y de la capacidad del país para sostener el sistema logístico y operativo de sus fuerzas armadas.
La incorporación de los A-29 Super Tucano proporciona a Paraguay una herramienta operativa concreta para tareas de vigilancia aérea y control del territorio. En un contexto regional afectado por redes ilícitas, esta adquisición permite al país contar con una plataforma comprobada en escenarios reales y facilitar la cooperación con otras fuerzas aéreas sudamericanas.