Arqueólogos sugieren que edificio en Cástulo, antes considerado iglesia, pudo ser sinagoga del siglo IV, según estudio reciente.
Descubrimiento arqueológico en Cástulo revela indicios judíos
Arqueólogos españoles publicaron en julio de 2025 un estudio en la revista Vegueta que sugiere que un edificio del siglo IV en Cástulo, antes identificado como iglesia cristiana, presenta características de una sinagoga. La estructura, ubicada en la antigua ciudad ibero-romana cerca de Linares, Andalucía, contiene artefactos como lámparas de aceite con menorás y una inscripción hebrea, hallazgos que desafían su interpretación inicial como templo cristiano.
El equipo, liderado por Bautista Ceprián, David Expósito Mangas y José Carlos Ortega Díez, encontró tres lámparas de aceite con menorás de siete brazos, un azulejo con una menorá de cinco brazos y una tapa de frasco con texto hebreo. Estos objetos, descubiertos entre 2011 y 2021, indican una posible presencia judía en Cástulo durante los siglos IV y V. La ausencia de artefactos cristianos refuerza la hipótesis de la sinagoga.
La estructura, conocida como Edificio S, presenta una planta casi cuadrada con un ábside orientado al este, puertas en los lados norte y sur, y una posible bimah, plataforma típica de sinagogas. Su ubicación cerca de una casa de baños romana, que los cristianos de la época consideraban pagana, sugiere que no habría sido un lugar de culto cristiano, según el estudio.
El abandono del edificio, datado en el siglo VI, coincide con la desaparición de la comunidad judía local, según registros arqueológicos. La ley antijudía de 612 del rey visigodo Sisebut, que no menciona a Cástulo, pero sí a otras ciudades cercanas como Martos y Baeza, sugiere que esta comunidad pudo haber desaparecido antes de esa fecha.
Hallazgos clave en el sitio arqueológico de Cástulo
- Tres lámparas de aceite con menorás de siete brazos que se encontraron en el sitio.
- Azulejo con menorá de cinco brazos y tapa con inscripción hebrea.
- Estructura con planta cuadrada y ábside, inusual para iglesias cristianas.
- Ubicación cerca de baños romanos, incompatible con culto cristiano.
Contexto histórico de la presencia judía en Cástulo
Cástulo, situado en la margen derecha del río Guadalimar, fue un centro clave en el sur de la Península Ibérica durante la Antigüedad. Su recinto amurallado de 50 hectáreas y su posición en rutas comerciales facilitaron el acceso a recursos como hierro, plata y cobre. La ciudad albergó diversas comunidades, incluidas las judías, que convivieron con romanos y cristianos en los siglos IV y V.
La evidencia arqueológica sugiere que la comunidad judía de Cástulo vivió en coexistencia pacífica con otros grupos antes de que la influencia cristiana aumentara. A finales del siglo IV, la presión para convertirse al cristianismo se aumentó, y quienes se negaron fueron expulsados, según Ceprián. Este contexto explica la posible desaparición de la comunidad antes del siglo VII.
El proyecto Cástulo, Sefarad: Primera Luz, que comenzó en 2023, amplió las excavaciones en 600 metros cuadrados y se enfocó en capas de los siglos IV y V. Financiado por la Consejería de Cultura y Deportes de Andalucía, el estudio busca aclarar la extensión del barrio judío y la función exacta del Edificio S.
La inscripción hebrea que se halló, aunque está mal conservada, ofrece pistas sobre la identidad judía. Los expertos debaten si dice “del perdón”, “luz del perdón” o “Canción a David”, pero su presencia refuerza la hipótesis de una sinagoga. La falta de registros escritos sobre judíos en Cástulo genera cautela en las conclusiones.
Sinagogas de la Antigüedad tardía en la Península Ibérica
Si se confirma como sinagoga, el Edificio S de Cástulo sería una de las más antiguas de España, junto a las de Barcelona y Elche, según la Fundación para la Herencia Judía y el Centro de Arte Judío de la Universidad Hebrea de Jerusalén. La sinagoga de Barcelona, datada del siglo III o IV, fue restaurada en 2002 tras siglos de uso no religioso.
La sinagoga de Elche, que se identificó por un mosaico del siglo I con inscripciones griegas, confirma una presencia judía temprana en la costa mediterránea. Estos sitios, junto con Cástulo, indican que las comunidades judías se establecieron en la Península Ibérica tras la destrucción del Segundo Templo en 70 d.C., según registros históricos.
La persecución de los judíos en Hispania se aumentó después de la conversión de los visigodos al cristianismo en 587. El rey Sisebut, en 612, promulgó leyes que obligaron a muchos a convertirse o a salir del territorio. La ausencia de Cástulo en estas leyes sugiere que su comunidad judía ya no existía para entonces.
Las excavaciones en Cástulo continuarán con el objetivo de encontrar pruebas definitivas que confirmen la función del Edificio S. Los arqueólogos tienen previsto abrir el sitio al público y preservar su valor histórico y cultural, según informó Ceprián en entrevistas recientes.