Donald Trump podría mantener una reunión con Vladimir Putin la próxima semana, tras calificar como “altamente productivas” las conversaciones celebradas en Moscú entre el enviado estadounidense Steve Witkoff y el presidente ruso. Sería el primer encuentro bilateral entre ambos líderes desde que Trump regresó al cargo en enero. El tema se abordó en una llamada telefónica con Volodymyr Zelensky, que también incluyó a Mark Rutte y a los líderes de Reino Unido, Alemania y Finlandia.
Karoline Leavitt, portavoz de la Casa Blanca, declaró que Trump mantiene disposición para reunirse tanto con Putin como con Zelensky. “El presidente Trump quiere que termine esta guerra brutal”, afirmó. Fuentes citadas por The New York Times y CNN señalaron que Trump tiene previsto un encuentro con Putin la próxima semana, seguido de una posible reunión trilateral con Zelensky. Sin embargo, Marco Rubio indicó que la cita aún no estaba confirmada y que no se había programado ninguna llamada entre ambos mandatarios.
Benjamin Netanyahu ha intervenido como intermediario entre Trump y Putin, con el objetivo de reducir la tensión. Según la emisora pública israelí Kan, esta labor se ha desarrollado a través de contactos diplomáticos recientes. La conversación con Zelensky ocurrió después del encuentro entre Witkoff y Putin, celebrado el 6 de agosto en Moscú, donde el Kremlin calificó las negociaciones como “productivas”, en el contexto del ultimátum impuesto por Trump sobre nuevas sanciones.
Trump escribió en su plataforma Truth que se había logrado “un gran progreso” en la conversación con las autoridades rusas. Afirmó haber informado posteriormente a líderes europeos sobre el desarrollo de las conversaciones. En paralelo, un funcionario estadounidense declaró que las sanciones secundarias se implementarían en un plazo de dos días, mientras continúa la ofensiva rusa sobre territorio ucraniano.
La Casa Blanca ha evitado precisar qué medidas adoptará Trump si no se logra un avance hacia la paz. No obstante, el expresidente ha amenazado con imponer aranceles secundarios dirigidos a socios comerciales de Rusia, como China e India. El miércoles, Trump ordenó elevar los aranceles sobre productos indios, en respuesta a la continuidad de las importaciones de petróleo ruso por parte de Nueva Delhi.
Trump declaró que esperaría el desenlace de las conversaciones en Moscú antes de aplicar nuevas sanciones. Su objetivo declarado consiste en restringir las exportaciones rusas, aunque esta decisión podría provocar una disrupción económica de alcance internacional. “Vamos a ver qué pasa. Tomaremos esa determinación en ese momento”, manifestó ante periodistas. El Kremlin, sin mencionar directamente a Trump, calificó como “ilegítimas” las amenazas de aumentar los aranceles a sus aliados comerciales.
Desde febrero de 2022, la guerra ha causado decenas de miles de muertes, desplazamientos masivos y una devastación considerable en el territorio ucraniano. Moscú exige concesiones territoriales y la renuncia al apoyo occidental como condiciones para el cese de las hostilidades. Por su parte, Kiev exige un alto el fuego inmediato, y Zelensky ha instado recientemente a sus aliados a respaldar un cambio de régimen en Moscú.
Las tensiones aumentaron con la orden de Trump de movilizar dos submarinos nucleares tras una confrontación digital con Dmitry Medvedev. Según Trump, ambos submarinos ya se encuentran en la región. En paralelo, Rusia anunció el fin de una moratoria autoimpuesta sobre misiles de alcance intermedio con capacidad nuclear, y sugirió que podría desplegar este tipo de armamento en respuesta a movimientos estadounidenses en zonas próximas a su territorio.
El miércoles, las autoridades ucranianas informaron que un ataque ruso con misiles alcanzó un campamento de vacaciones en Zaporizhzhia. Al menos dos personas murieron y doce resultaron heridas, según el servicio de emergencias del país.