Israel Railways interrumpirá el servicio ferroviario en Tel Aviv desde el 20 hasta el 26 de agosto para realizar tareas de mantenimiento y reparar daños en la infraestructura eléctrica cerca del cruce Ganot, al sur de la ciudad, causados por un tren de carga el pasado jueves. Las reparaciones, que tomarán una semana y media, afectan significativamente el tráfico ferroviario en el centro de Israel.
Los trenes entre Jerusalén y Tel Aviv operan hasta el aeropuerto Ben Gurión, donde los pasajeros deben transbordar, ya que los trenes eléctricos no pueden continuar. Se emplean trenes diésel como alternativa. Además, las líneas Ashkelon-Binyamina y Beit Shemesh-Netanya finalizan en Lod hasta completar las reparaciones, y el servicio entre Ganei Aviv y Kfar Chabad permanece cancelado.
Para mitigar las molestias, Israel Railways ofrece un servicio gratuito de autobuses entre las estaciones Tel Aviv HaHagana, HaShalom y Savidor Center, con salidas cada cinco minutos. Las estaciones HaShalom y HaHagana permanecerán cerradas durante siete días, y los trenes desde Jerusalén, Modi’in y el norte no avanzarán más allá del aeropuerto Ben Gurión ni de Savidor Center.
El mantenimiento, programado inicialmente para septiembre, se adelantó para evitar mayores inconvenientes al público, según un comunicado de Israel Railways. La empresa decidió aprovechar la reparación de los cables eléctricos dañados para realizar trabajos de seguridad en las vías. La ministra de Transporte, Miri Regev, afirmó el lunes que no existe “caos en el transporte”, sino una situación “desagradable”.
A pesar de las interrupciones, agravadas el domingo por una huelga nacional que bloqueó carreteras principales, Israel Railways destacó que el daño al sistema eléctrico constituye “un megaevento sin precedentes”, según declararon sus representantes a medios locales la semana pasada. Los pasajeros enfrentan cambios significativos en sus trayectos habituales mientras duren las obras.