El grupo irlandés Kneecap repitió sus críticas a la guerra de Israel en Gaza durante un concierto en Francia, a pesar de las objeciones de grupos judíos y funcionarios del gobierno.
Kneecap se presenta en Francia a pesar de oposición de la comunidad judía
El grupo de rap irlandés Kneecap repitió sus críticas a la guerra de Israel en Gaza durante una actuación en las afueras de París el domingo. El concierto tuvo lugar a pesar de las objeciones de grupos judíos franceses y funcionarios del gobierno. La banda afirmó que un grupo de “sionistas” trató de interrumpir el comienzo de su actuación con silbidos. Los organizadores mantuvieron a la banda en el programa, por lo cual autoridades locales retiraron los subsidios. El grupo también apoya el republicanismo irlandés y critica al imperialismo británico.
Kneecap ha usado sus conciertos para hacer campaña por la causa palestina y criticar a Israel. Liam O’Hanna, de 27 años, que actúa bajo el nombre artístico de Mo Chara, fue acusado en Inglaterra en mayo. El cargo que se le imputa es de exhibir una bandera del grupo terrorista libanés Hezbolá durante un concierto en Londres en noviembre. En junio, durante el Festival de Glastonbury, Chara declaró que “Israel son criminales de guerra”. El grupo se perdió la oportunidad de tocar en el Festival Sziget en Budapest, tras la prohibición de ingreso al país por parte de Hungría, un aliado de Israel.
Antes del festival, Matthieu Ducos, director de Rock en Seine, declaró a AFP que confiaban en que el grupo actuaría de la manera correcta. El municipio de Saint-Cloud, por primera vez, retiró su subsidio de 40.000 euros. La región de Île-de-France, que incluye París, también canceló su financiación para la edición de 2025. Sin embargo, tales movimientos no ponen en peligro la viabilidad del festival, cuyo presupuesto es de entre 16 y 17 millones de euros este año. El grupo ya tocó dos veces en Francia este verano, sin incidentes.
Yonathan Arfi, presidente del Consejo Representativo de Instituciones Judías de Francia (CRIF), pidió la cancelación del concierto y afirmó que el grupo “profana la memoria de las 50 víctimas francesas de Hamás el 7 de octubre, así como de todas las víctimas francesas de Hezbolá”. Por su parte, el ministro del Interior francés, Bruno Retailleau, aseguró que se requeriría vigilancia contra “cualquier comentario de naturaleza antisemita, apología del terrorismo o incitación al odio”.
Hechos clave sobre el grupo y la guerra
- El nombre del grupo Kneecap proviene del “kneecapping”, ataque de castigo republicano irlandés.
- El miembro del grupo Liam O’Hanna enfrenta un cargo por supuesta exhibición de bandera de Hezbolá.
- Las autoridades húngaras negaron el ingreso del grupo a su país para un festival musical.
Aumento del antisemitismo en Francia: Kushner denuncia la inacción del gobierno
Antes de la actuación de Kneecap, AFP obtuvo una carta del embajador de Estados Unidos en Francia, Charles Kushner, dirigida al presidente francés, Emmanuel Macron. En la misiva, Kushner denuncia la acción de su gobierno contra el antisemitismo como insuficiente. Los comentarios del embajador coinciden con los del primer ministro Benjamín Netanyahu. La carta, con fecha 25 de agosto, se envió en el 81 aniversario de la liberación aliada de París, que puso fin a la deportación de judíos de suelo francés bajo la ocupación alemana nazi.
“Escribo por profunda preocupación por el dramático aumento del antisemitismo en Francia y la falta de acción suficiente por parte de su gobierno para enfrentarlo”, escribió Kushner. También agregó que “en Francia, no pasa un día sin que los judíos sean agredidos en la calle, las sinagogas o las escuelas desfiguradas o los negocios de propiedad judía sean vandalizados”. El embajador argumentó que el odio a los judíos se “disparó desde el bárbaro asalto de Hamás el 7 de octubre de 2023”.
Los comentarios de Kushner coinciden con los de Netanyahu. El primer ministro israelí acusó a Macron de fomentar el antisemitismo. Según Netanyahu, el antisemitismo ha “aumentado” en Francia tras el anuncio del presidente francés el mes pasado de que reconocerá el Estado palestino. La oficina de Macron calificó la acusación de “abyecta” y “errónea”. Al igual que Netanyahu, Kushner denunció las críticas de Macron a Israel por la guerra en Gaza y su planeado reconocimiento de un Estado de Palestina.
Según Kushner, tales movimientos “envalentonan a los extremistas, alimentan la violencia y ponen en peligro la vida judía en Francia”. El embajador afirmó que “en el mundo de hoy, el antisionismo es antisemitismo, simple y llanamente”. Kushner indicó que encuestas muestran que la mayoría de los ciudadanos franceses creen que podría ocurrir otro Holocausto en Europa, y casi la mitad de los jóvenes franceses nunca han oído hablar del Holocausto. Francia es el hogar de la población judía más grande de Europa occidental, con alrededor de medio millón de personas.
Comunidad judía y musulmana en Francia reportan aumento de crímenes de odio
Francia también tiene una importante comunidad musulmana sensible a la situación del pueblo palestino en Gaza. Ambas comunidades han reportado un aumento en los crímenes de odio desde el inicio de la guerra. La preocupación por el aumento del antisemitismo ha sido un tema recurrente en el discurso público y político. Las autoridades francesas se enfrentan a desafíos para equilibrar el derecho a la libertad de expresión y la necesidad de proteger a las comunidades de la incitación al odio. La controversia sobre el concierto de Kneecap es un ejemplo de las tensiones existentes en la sociedad francesa.
El gobierno francés ha tomado medidas para combatir el antisemitismo. Sin embargo, estas acciones han sido criticadas como insuficientes por algunas figuras. La carta del embajador Kushner y las declaraciones de Netanyahu son una muestra de la presión internacional que se ejerce sobre Francia. La situación en Gaza ha polarizado el debate. Esto genera tensiones entre las comunidades y dentro del gobierno francés. La falta de consenso sobre la política exterior hacia la guerra israelí-palestino agrava las divisiones internas.
La postura del gobierno francés sobre la guerra en Gaza ha sido objeto de críticas tanto a nivel nacional como internacional. Las declaraciones del presidente Macron sobre el reconocimiento de un Estado palestino generaron una fuerte reacción. La comunidad judía en Francia expresa su preocupación por el impacto de esta postura. Mientras tanto, la comunidad musulmana, y los partidarios de la causa palestina, ven en ella un paso positivo. Este contexto complejo influye en la vida diaria de los ciudadanos franceses, especialmente en las comunidades judía y musulmana.
El debate sobre el antisemitismo y la islamofobia se ha incrementado en Francia. Las cifras de crímenes de odio demuestran la gravedad de la situación. Las autoridades francesas intentan implementar políticas que promuevan la convivencia. No obstante, los recientes acontecimientos muestran que aún existen desafíos. El caso del concierto de Kneecap es un claro ejemplo de las tensiones políticas y sociales que la guerra en Oriente Medio ha provocado en Europa. La situación requiere una respuesta coordinada por parte de las autoridades para evitar una escalada de la violencia y el odio.