Entrega de armas en campamentos palestinos podría mejorar derechos laborales y de propiedad para 200.000 refugiados en el Líbano.
Legislación propuesta para palestinos en el Líbano
El Comité de Diálogo Libanés-Palestino trabaja en una legislación que podría presentarse a fin de año para mejorar los derechos de los palestinos. Aunque no otorgará ciudadanía, busca fortalecer derechos laborales y de propiedad para los 200.000 descendientes de refugiados palestinos en el Líbano, según Ramez Dimashkieh, jefe del comité.
Los palestinos en el Líbano, reconocidos como refugiados por la ONU, enfrentan restricciones severas. No pueden trabajar en muchas profesiones, tienen pocas protecciones legales y no pueden poseer propiedades. La legislación propuesta busca abordar estas limitaciones para mejorar su calidad de vida.
La entrega de armas en campamentos como Burj al-Barajneh es vista como un paso hacia la desmilitarización. Dimashkieh cree que esto facilitará el apoyo público para la legislación, al mostrar a los palestinos como una sociedad civil en lugar de campamentos militarizados.
El plan de desarme, anunciado por Mahmoud Abbas y Joseph Aoun, busca retirar armas de los 12 campamentos palestinos. Aunque la cantidad de armas entregadas ha generado escepticismo, Dimashkieh destaca que cualquier arma en manos del ejército libanés es un avance.
Beneficios esperados del desarme en campamentos
- Mejora de derechos laborales para palestinos en el Líbano.
- Posibilidad de adquirir propiedades para refugiados palestinos.
- Reducción de enfrentamientos armados en campamentos.
- Transición hacia una administración civil en los campamentos.
Desarme en campamentos palestinos y su impacto
La semana pasada, facciones palestinas начали entregar armas en Burj al-Barajneh, incluyendo ametralladoras y granadas. El jueves, tres campamentos en el sur del Líbano también entregaron armamento, como cohetes Grad y RPG, al ejército libanés.
Los campamentos palestinos no están bajo control de las autoridades libanesas, y enfrentamientos entre facciones rivales, como Fatah y grupos islamistas, han causado víctimas. En 2023, combates en Ein el Hilweh mataron a 30 personas y dañaron escuelas de la UNRWA.
La UNRWA, aunque no participa en el desarme, espera que este proceso mejore la seguridad y estabilidad en los campamentos. Dorothee Klaus, directora de UNRWA en el Líbano, señaló que la agencia carece de recursos para reabrir escuelas dañadas.
El desarme es visto como un precursor para desarmar a Hezbolá, que enfrenta presión para cumplir con una resolución de la ONU de 2006. Sin embargo, el grupo respaldado por Irán se ha negado a desarmarse hasta ahora.
Transición hacia una administración civil en campamentos
Dimashkieh propone que los campamentos sean patrullados por la policía libanesa y gobernados por funcionarios civiles palestinos. Este cambio requerirá un período de transición, pero se están dando pasos para lograrlo.
La Autoridad Palestina revisó recientemente su liderazgo en el Líbano, destituyendo a varios funcionarios. Una delegación palestina trabaja en la elección de nuevos “comités populares” para administrar los campamentos como autoridades municipales.
Algunas facciones, como Hamás, rechazan el desarme, y dentro de Fatah hay opiniones divididas. Sin embargo, Sobhi Abu Arab, de las Fuerzas de Seguridad Nacional Palestinas, afirmó que Fatah está comprometido con la decisión de Abbas.
Dimashkieh se muestra optimista tras conversaciones iniciales con Hamás, creyendo que se puede avanzar hacia un acuerdo inclusivo. El desarme y la legislación propuesta buscan transformar los campamentos en espacios más seguros y con mayores derechos.