La OTAN responde a intrusiones de drones rusos en espacio aéreo polaco con nueva misión para fortalecer defensas en flanco oriental y disuadir acciones imprudentes de Moscú.
Incidente de drones rusos en Polonia y respuesta inmediata de la OTAN
Tras la violación sin precedentes del espacio aéreo polaco por parte de drones rusos a inicios de esta semana, la OTAN ha puesto en marcha la Operación Eastern Sentry, una nueva misión concebida para fortalecer las defensas en su flanco oriental. La operación, anunciada el 12 de septiembre de 2025, constituye una respuesta directa a lo que la Alianza ha calificado de “comportamiento imprudente e inaceptable” por parte de Moscú, y busca tranquilizar a los Estados miembros respecto a la determinación de la OTAN para salvaguardar su territorio. El anuncio se produce en el contexto de los sucesos del 10 de septiembre, cuando múltiples drones rusos penetraron en territorio polaco y provocaron lo que los funcionarios han denominado el primer enfrentamiento de este tipo en la historia de la OTAN.
Aviones polacos F-16 y neerlandeses F-35 despegaron hacia la zona y abrieron fuego. De acuerdo con Defense News, que cita fuentes oficiales, cazas de la OTAN derribaron tres drones, mientras que al menos otros ocho se estrellaron en el interior de Polonia. Afortunadamente, no hubo víctimas, aunque se recuperaron restos en varios lugares. El Mando de Operaciones de Polonia describió las intrusiones como “violaciones reiteradas” de su espacio aéreo, en tanto que el presidente polaco Andrzej Duda las caracterizó más tarde como un intento deliberado de poner a prueba las defensas de la OTAN.
El 13 de septiembre, fuerzas polacas y de la OTAN volvieron a estar en máxima alerta ante informes de drones rusos en el oeste de Ucrania, y uno de ellos se interceptó en el norte de Rumanía. En las horas posteriores al incidente, Polonia invocó el artículo 4 del Tratado de la OTAN, que permite a los Estados miembros solicitar consultas cuando perciben una amenaza a su integridad territorial, independencia o seguridad. Esta invocación representó la octava vez que se activa dicho artículo desde la fundación de la OTAN en 1949, la más reciente al comienzo de la invasión rusa de Ucrania en 2022.
El Consejo del Atlántico Norte se reunió el 10 de septiembre, y los Estados miembros expresaron su solidaridad con Polonia y condenaron las acciones de Rusia. El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, declaró que el incidente “no constituyó un caso aislado” y advirtió de que las violaciones del espacio aéreo de esta naturaleza resultan “absolutamente imprudentes y peligrosas”. En una conferencia de prensa, Rutte subrayó que las defensas antiaéreas de la OTAN funcionaron conforme a lo previsto durante el incidente con los drones.
Contribuciones iniciales y sistemas clave en Operación Eastern Sentry
- Cazas de la OTAN derribaron tres drones rusos el 10 de septiembre en Polonia.
- Ocho drones adicionales se estrellaron en territorio polaco sin causar víctimas.
- Contribuciones incluyen dos F-16 daneses, una fragata antiaérea y tres Rafale franceses.
- Cuatro Eurofighter alemanes, F-35A italianos y neerlandeses se despliegan en la región.
Detalles de la Operación Eastern Sentry y su enfoque multidominio
Gracias a una acción coordinada que involucró a cazas polacos F-16, neerlandeses F-35, aeronaves italianas CAEW, aviones cisterna MRTT de la OTAN y baterías alemanas Patriot. “Nuestras defensas antiaéreas se activaron y garantizaron con éxito la protección del territorio de la OTAN”, señaló Rutte, en elogio de la profesionalidad de los pilotos y las tripulaciones implicadas. En este contexto, la OTAN ha establecido una nueva misión denominada Operación Eastern Sentry. La Alianza la presenta como una actividad multidominio que inicialmente se centrará en la defensa de Polonia, pero con la intención de extenderse por todo el flanco oriental de la OTAN, desde el Báltico hasta el mar Negro.
El comandante supremo aliado en Europa (SACEUR), general Alexus G. Grynkewich, afirmó que Eastern Sentry será “flexible y ágil, y proporcionará una disuasión y defensa aún más focalizadas en el momento y lugar precisos en que se requieran”. Insistió en que la misión busca ofrecer tanto refuerzos inmediatos como una resiliencia a largo plazo. “La violación del espacio aéreo polaco a inicios de esta semana no fue un incidente aislado y afecta a más que solo Polonia”, declaró Grynkewich. “Aunque prosigue una evaluación completa del suceso, la OTAN no espera: actúa”.
Según la OTAN, las contribuciones iniciales incluyen dos F-16 daneses y una fragata de guerra antiaérea, tres Rafale franceses y cuatro Eurofighter alemanes. Italia y los Países Bajos ya mantienen desplegados F-35A en Estonia y Polonia, respectivamente. El Reino Unido ha manifestado su disposición a sumarse, e informes sugieren que podría enviar hasta seis cazas Typhoon. España también se ha comprometido a aportar medios aéreos, de acuerdo con Reuters, aunque por el momento no se han revelado detalles específicos.
Eastern Sentry incorporará mayor potencia aérea y también robustecerá las defensas antiaéreas y antimisiles en capas de la OTAN. La operación fomentará una cooperación más estrecha entre el Mando de Operaciones Aliado y el Mando de Transformación Aliado, este último encargado de experimentar y desplegar nuevas tecnologías. La OTAN ha destacado los sistemas contras drones como un enfoque particular, con el fin de afrontar los retos que plantean los vehículos aéreos no tripulados en los conflictos modernos a gran escala.
Vulnerabilidades ante drones rusos y escalada en el flanco oriental de la OTAN
De hecho, informes indican que Polonia ya avanza en el cierre de las lagunas en sus defensas contras UAS. El incidente en Polonia resaltó aún más esta vulnerabilidad. Funcionarios de la OTAN confirmaron que al menos 19 drones rusos ingresaron en el espacio aéreo polaco el 10 de septiembre, y uno de ellos supuestamente penetró hasta 160 millas en el interior del país, lo que obligó al cierre temporal de cuatro aeropuertos. Los drones recuperados en Polonia se han identificado como Gerberas de diseño ruso, descritos como complementos simplificados y más económicos de los Shahed-136 de origen iraní, ampliamente empleados por Rusia en Ucrania.
Rusia utiliza este tipo de drones principalmente como señuelos para distraer o localizar las defensas antiaéreas ucranianas, con roles secundarios de reconocimiento y ataque. Desde el inicio de la invasión a gran escala de Rusia contra Ucrania en 2022, drones y misiles han incursionado ocasionalmente en territorio de la OTAN, incluidos Rumanía, Estonia, Letonia y Lituania. No obstante, funcionarios y analistas de la OTAN coinciden en que la magnitud del último incidente supone una escalada significativa. El suceso reciente también ha avivado un debate político en el seno de la Alianza.
Aunque el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sugirió que las incursiones de drones pudieron ser accidentales, los líderes polacos rechazaron de plano esa interpretación. Varsovia sostuvo que los vuelos constituyeron sondas intencionadas de las defensas antiaéreas de la OTAN, una rara discrepancia pública con Washington en materia de evaluaciones de seguridad. Para los líderes europeos, el episodio reforzó las inquietudes sobre la preparación de la OTAN para contrarrestar ataques masivos sostenidos con drones, rasgo característico de la campaña rusa en Ucrania. Según Defense News, Rusia lanzó hace poco su asalto aéreo más extenso desde 2022, con más de 800 drones y señuelos.
En las Naciones Unidas, Estados Unidos se unió a sus aliados para condenar las incursiones como violaciones del derecho internacional y de la Carta de la ONU. Rusia, por su parte, negó haber apuntado a Polonia, y su embajador ante la ONU insistió en que los drones empleados carecían de alcance suficiente para llegar al territorio polaco. La OTAN, sin embargo, ha sido inequívoca en su valoración de que drones rusos ingresaron en el espacio aéreo aliado y se les respondió en consecuencia. Eastern Sentry coincide asimismo con el arranque de Zapad 25, un ejercicio militar ruso-bielorruso de gran envergadura que se desarrolla en Bielorrusia, el oeste de Rusia y los mares Báltico y de Barents.
Reacciones políticas y medidas de disuasión ante ejercicios rusos en la región
Tales maniobras, que se celebran de forma periódica, se consideran en general demostraciones de fuerza dirigidas contra la OTAN. Polonia ha reaccionado con la movilización de 40.000 efectivos en sus fronteras orientales y la restricción de los cruces con Bielorrusia. De hecho, las autoridades polacas han bloqueado tanto los pasos fronterizos por carretera como por ferrocarril. Aunque los líderes de la OTAN han evitado calificar el incidente con drones en Polonia como un preludio deliberado a una escalada, han dejado claro que la Alianza actuará con decisión para impedir nuevas violaciones.
“Eastern Sentry y este nuevo enfoque proporcionarán una disuasión y defensa aún más focalizadas y flexibles en el lugar y momento en que se precisen para proteger a nuestra gente y disuadir actos ulteriores imprudentes y peligrosos”, destacó Grynkewich. Rutte hizo eco de esta posición y acentuó que la OTAN “defenderá cada pulgada del territorio aliado”. Asimismo, instó a los miembros a elevar el gasto en defensa y las capacidades de producción, en consonancia con los compromisos asumidos en la cumbre de la Alianza celebrada en La Haya a inicios de este año.