El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que las fuerzas israelíes ejecutaron “una de las recuperaciones militares más sorprendentes de la historia”, pero advirtió que “aún no hemos terminado”. Señaló que los últimos restos de Hamás permanecen atrincherados en la ciudad de Gaza y destacó que Israel debe completar la operación porque el grupo terrorista prometió repetir el ataque del 7 de octubre “una y otra y otra vez”.
Netanyahu explicó que el objetivo es finalizar la acción “lo más rápido posible”. Recordó que gran parte del mundo “ya no recuerda el 7 de octubre”, pero Israel mantiene la memoria del ataque. Instó a los espectadores a escanear el código QR de su solapa para “ver por qué luchamos y por qué debemos ganar”.
El primer ministro detalló la situación de los 20 rehenes que aún permanecen con vida, quienes están “privados de comida, torturados, privados de luz natural. Privados de humanidad”. Durante su intervención, Netanyahu leyó los nombres de los rehenes vivos, excluyendo a Tamir Nimrodi y Bipin Joshi, quienes no han sido confirmados como muertos, pero sobre quienes existen serias preocupaciones.
