El presidente estadounidense, Donald Trump, agradece personalmente a varios líderes musulmanes, entre ellos el rey saudí Salman Al Saud, el emir Qatarí Tamim Al Thani, el presidente emiratí Mohammed Bin Zayed y el ministro de Asuntos Exteriores Abdullah Bin Zayed. Los líderes “nos han estado aportando ideas, asuntos que pueden manejar y otros que no, bastante complejos”.
También agradece al rey Abdalá de Jordania y al presidente turco Recep Tayyip Erdogan, un crítico de Israel y partidario de Hamás. “Es amigo mío, es un hombre fuerte, pero un buen hombre”, dice Trump sobre Erdogan.
Trump agradece al presidente egipcio Abdel Fatah Al Sisi, al primer ministro paquistaní Shehbaz Sharif y al presidente indonesio Prabowo Subianto, quienes se refirieron a Israel en términos inusualmente cordiales en la ONU la semana pasada.
“Si Hamás la acepta”, continúa, “esta propuesta exige la liberación inmediata de todos los rehenes restantes, sin superar en ningún caso un plazo de 72 horas. Así los rehenes regresan y los cuerpos de los jóvenes son devueltos de inmediato”.
Su plan, dice, “implica el fin inmediato de la guerra en su conjunto, no solo en Gaza”.
