La inflación anual de Israel descendió en septiembre a 2,5%, tras registrar 2,9% en agosto, 3,1% en julio y 3,3% en junio, de acuerdo con la Oficina Central de Estadísticas. El descenso se atribuyó a la reducción en los precios de la fruta fresca, los viajes al extranjero y los rubros de entretenimiento y cultura.
El índice de precios al consumidor cayó un 0,6% en septiembre, cifra que superó las previsiones de los analistas, quienes esperaban una baja de entre 0,2% y 0,3%. El indicador permaneció dentro del rango objetivo del gobierno, establecido entre 1% y 3%, por primera vez desde junio de 2024.
El presidente de la Asociación de Fabricantes de Israel, Ron Tomer, solicitó al banco central una reducción inmediata de las tasas de interés para aliviar la carga financiera de los exportadores. Indicó que el fortalecimiento del shekel afecta la competitividad internacional de las exportaciones israelíes.
“En un momento en que la inflación se está desacelerando y los exportadores se enfrentan a un mercado global lleno de incertidumbre y cancelaciones de acuerdos, es necesario garantizar que la política monetaria no profundice el daño al principal motor de crecimiento de la economía”, afirmó Tomer.
Los precios de la fruta fresca descendieron un 3,2% en septiembre, mientras que los de entretenimiento y cultura bajaron un 2,4%. Las comunicaciones y los transportes registraron una reducción del 2,2%. Los gastos de viajes al extranjero cayeron un 16,2% y los costos de alojamiento y viajes internos disminuyeron un 9,8%.
Los aumentos más notables se produjeron en los precios de las verduras frescas, que subieron un 3,5%. Los seguros de automóviles aumentaron un 0,7% y la atención médica un 0,3%.
“La corrección en los precios de los vuelos este mes es muy significativa y la razón principal de la sorpresa a la baja en el índice de precios al consumidor”, explicó el estratega jefe de Mizrahi Tefahot Bank, Yonnie Fanning. Añadió que podrían registrarse nuevas reducciones en los precios de los vuelos debido al incremento de la oferta y al fortalecimiento del shekel.
Los alquileres en contratos renovados aumentaron un 2,6% en septiembre, mientras que los contratos para nuevos inquilinos subieron un 5,3%.