Rotem Cooper, hijo de Amiram Cooper, quien fue tomado como rehén en el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023 y asesinado durante su cautiverio, informó en una conferencia de prensa que su padre es el último sobreviviente de un grupo de siete rehenes que inicialmente fueron retenidos juntos en Gaza. Cooper forma parte de los 13 rehenes muertos cuyos cuerpos aún permanecen en el Strip.
Amiram Cooper, economista y poeta de 85 años al momento de su secuestro, y su esposa, Nurit, fueron sacados de manera violenta de su hogar en el kibutz Nir Oz durante el ataque, cuando los terroristas dispararon a través de la puerta principal. Permanecieron juntos bajo tierra junto a otros miembros del kibutz hasta que Nurit fue liberada el 23 de octubre de 2023.
El 18 de diciembre de 2023, Hamás difundió un clip de propaganda que mostraba a Amiram junto a Chaim Peri y Yoram Metzger. En marzo de 2024, la organización afirmó que los tres habían muerto durante ataques aéreos israelíes. En junio de ese mismo año, Israel confirmó que Cooper, Peri, Metzger y Nadav Popplewell habían sido asesinados en cautiverio. Posteriormente, el kibutz realizó una ceremonia de despedida para Cooper, y su familia se sentó en shiva en su memoria.

En agosto de 2024, las FDI recuperaron los cuerpos de seis rehenes muertos: Alex Dancyg, Yagev Buchshtav, Peri, Metzger, Popplewell y Avraham Munder. Israel indicó que considera que Peri y Metzger fueron ejecutados a tiros por sus captores a mediados de febrero de 2024.
Rotem Cooper subrayó la necesidad de mantener una presión continua sobre Hamás para asegurar la liberación de los rehenes muertos restantes. Respecto al acuerdo de alto el fuego que entró en vigor a principios de este mes y que prevé la liberación de todos los rehenes israelíes, Cooper comentó: “Es un acuerdo excelente”. Añadió que el pacto ha generado “excelentes resultados. Estamos en una situación diferente a la de hace dos semanas, con 20 rehenes vivos en casa y 15 devueltos para su entierro”.
Cooper, que ha residido durante muchos años en Estados Unidos, habló desde la casa de sus padres en Nir Oz, donde se observan algunos signos de reconstrucción, incluyendo agujeros de bala que han sido enyesados. Al respecto, expresó: “Es alentador verlo. Durante mucho tiempo solo hubo casas quemadas aquí”.
Antes del 7 de octubre, Nir Oz contaba con una población de 400 personas, de las cuales todas menos seis viviendas fueron quemadas o destruidas. Cooper indicó que próximamente vivirán allí unas 80 personas: 50 miembros del kibutz y alrededor de 30 integrantes del ejército. Señaló que Nir Oz fue “la zona cero” y recordó que “tuvimos 64 personas muertas y 76 tomadas como rehenes. El 7 de octubre afectó a todas y cada una de las familias”.
Finalmente, Cooper destacó la importancia de la reconstrucción de Nir Oz para preservar la memoria de su padre, ya que hará que el kibutz sea “más grande, más fuerte y más hermoso” que antes. Añadió: “Eso enviará un mensaje a Hamás”.
