La Fuerza Aérea de Estados Unidos incorpora el caza F-15EX Eagle II para mantener su superioridad aérea mediante una doctrina centrada en el fuego masivo.
La Fuerza Aérea incorpora el F-15EX para potenciar flotas tácticas
La Fuerza Aérea de Estados Unidos incorpora el F-15EX Eagle II, un caza polivalente derivado del F-15E Strike Eagle, para aumentar la capacidad de sus flotas tácticas con una carga que alcanza las 29.500 libras y permite transportar hasta 22 misiles en ciertas configuraciones, según datos de Boeing y publicaciones especializadas en defensa. Este avión, producido por Boeing, se integra en la estrategia aérea estadounidense para responder a amenazas en entornos disputados.
El volumen de fuego sustituye en parte la dependencia exclusiva del sigilo, de acuerdo con informes del Pentágono y análisis doctrinales. La Fuerza Aérea recibió las primeras unidades en 2021 y planea adquirir hasta 144 aparatos para reemplazar modelos antiguos como el F-15C/D, con entregas que continúan en instalaciones como la base Eglin en Florida. El F-15EX cuenta con controles de vuelo digitales por cable, una cabina digital completamente de vidrio y sistemas de misión actualizados.
Los sistemas facilitan la integración de software moderno. Sus motores generan un empuje que permite velocidades superiores a Mach 2,5, y su alcance excede los 1.200 millas náuticas con tanques conformes de combustible. Además, incorpora radares de próxima generación, como el AN/APG-82 AESA, y sensores que mejoran la detección de objetivos a distancias extendidas. El sistema de advertencia y supervivencia pasivo/activo Eagle, conocido como EPAWSS, proporciona capacidades de guerra electrónica.

Las capacidades permiten operar en espacios aéreos con alta densidad de amenazas y reducen la detectabilidad mediante herramientas electrónicas sin comprometer la carga útil. De este modo, el avión funciona como un sistema de armas de largo alcance que ingresa en entornos hostiles, según descripciones técnicas de Boeing. La configuración de dos asientos habilita roles como director aéreo para aeronaves de combate colaborativas, con pruebas en curso para su interoperabilidad con dichos sistemas no tripulados.
Características clave del armamento y rendimiento del F-15EX
- Carga útil de hasta 29.500 libras y capacidad para 22 misiles en configuraciones especializadas.
- Velocidad superior a Mach 2,5 y alcance que excede 1.200 millas náuticas con tanques conformes.
- Radar AN/APG-82 AESA y sensores para detección extendida de objetivos.
- Sistema EPAWSS para guerra electrónica y reducción de detectabilidad.
- Integración de armas hipersónicas con velocidades superiores a Mach 5.
El armamento del F-15EX permite salvas masivas en misiones
En cuanto al armamento, el F-15EX transporta hasta 12 misiles aire-aire avanzados de medio alcance AMRAAM en su configuración estándar, pero en variantes especializadas llega a 20 o 22 misiles de tamaño mediano, lo que hace que sea una plataforma para salvas masivas. Esta capacidad supera a la de otros cazas, ya que duplica el combustible, el alcance y la velocidad en comparación con modelos similares, con costos operativos reducidos.
El avión también integra armas hipersónicas, como se demostró en pruebas donde disparó proyectiles a velocidades superiores a Mach 5, lo cual amplía su rol en misiones de ataque a larga distancia. Los sistemas de redes permiten compartir datos con otras plataformas, lo que facilita operaciones conjuntas donde el F-15EX aumenta la efectividad al lanzar volúmenes elevados de munición desde posiciones de retaguardia.

Publicaciones como The War Zone destacan que esta carga masiva permite que el avión funcione con capacidad similar a un bombardero aunque clasificado como caza, con énfasis en el fuego saturado para sobrecargar defensas enemigas. La doctrina operativa del F-15EX consiste en el empleo de fuego masivo para contrarrestar la ventaja del sigilo en escenarios de alta intensidad, según documentos de la Universidad Nacional de Defensa y evaluaciones del Departamento de Defensa.
En lugar de priorizar la baja observabilidad radar, el avión utiliza su maniobrabilidad, velocidad y capacidad de carga para lanzar salvas que requieren que los adversarios dividan recursos defensivos. Pruebas del Pentágono, realizadas entre 2023 y 2024, mostraron que el F-15EX detecta y rastrea amenazas a rangos favorables, y utiliza sistemas a bordo y externos para identificar objetivos, incluso en simulaciones contra cazas de quinta generación como el F-35.
Despliegue y producción del F-15EX en contextos operativos
Estos ejercicios, coordinados por la Oficina de Pruebas y Evaluación Operativa del Departamento de Defensa, confirmaron su eficacia en combates aire-aire y aire-tierra, aunque señalaron vulnerabilidades ante misiles enemigos de largo alcance. La integración con redes militares permite que el F-15EX reciba datos de sensores remotos, lo que extiende su efectividad más allá de sus propios radares. La Fuerza Aérea de Estados Unidos despliega el F-15EX en unidades como el 85º Escuadrón de Evaluación y Pruebas en la base Eglin.
Allí se realizan vuelos para validar sus sistemas. Boeing aplica ensamblaje determinante de tamaño completo en la producción, lo que acelera la modernización y facilita actualizaciones futuras. El avión se exporta a aliados como Japón, Israel, Corea del Sur, Arabia Saudita, Singapur y Qatar, y promueve interoperabilidad en flotas conjuntas. En contextos de superioridad aérea, el F-15EX complementa plataformas sigilosas al proporcionar volumen de fuego en situaciones donde el sigilo no es primordial.

Como misiones de patrulla o escolta. Informes indican que su computadora de alta velocidad procesa datos en tiempo real, lo que mejora la respuesta en entornos dinámicos. La maniobrabilidad del aparato permite enfrentamientos contra aeronaves enemigas, con un énfasis en la letalidad a través de múltiples lanzamientos simultáneos. Boeing fabrica el F-15EX en instalaciones de San Luis, Misuri, con un programa que incorpora ingeniería digital para reducir tiempos de desarrollo.
La Fuerza Aérea asignó fondos para 80 unidades iniciales en el presupuesto fiscal de 2023, con opciones para expansiones adicionales. En pruebas operativas, el avión demostró interoperabilidad con drones de combate colaborativos, donde funciona como nodo de mando para dirigir formaciones mixtas. Esta capacidad se alinea con estrategias que combinan plataformas tripuladas y no tripuladas para maximizar el volumen de fuego en teatros de operaciones amplios.
Integración de sensores y evaluaciones del F-15EX en operaciones
Documentos doctrinales afirman que, en un entorno definido por salvas de largo alcance, el F-15EX proporciona una medida alternativa al sigilo, y prioriza la saturación de objetivos. La cabina de dos plazas facilita la gestión de misiones complejas, donde un operador maneja sistemas electrónicos mientras el piloto se concentra en la navegación. El F-15EX integra sensores que detectan amenazas en espectros múltiples, que incluyen infrarrojos y radiofrecuencia.

Lo que amplía su utilidad en operaciones nocturnas o con baja visibilidad. Su estructura reforzada soporta cargas elevadas sin comprometer la aerodinámica, y los tanques conformes aumentan el radio de acción sin penalizar la velocidad. En evaluaciones, el avión superó expectativas en escenarios donde lanzó misiles en secuencias rápidas y sobrecargó simulaciones de defensas integradas. Boeing reporta que el diseño permite actualizaciones modulares.
Como la incorporación de nuevos radares o software, para adaptarse a evoluciones tecnológicas. La Fuerza Aérea planea desplegar escuadrones completos en bases como Lakenheath en el Reino Unido y Kadena en Japón, y fortalece alianzas regionales.
