La prueba en Islington inició en octubre de 2025 y transmite video en tiempo real para apoyar respuestas policiales, identificar sospechosos y recoger evidencia.
Flujo operativo de despliegue remoto y transmisión en tiempo real central
El Servicio de Policía Metropolitana inició en octubre de 2025 una prueba en Islington con Aeronave no Tripulada como Primer Respondedor. El objetivo consiste en asistir a los oficiales durante llamadas de emergencia mediante imágenes en tiempo real. Las unidades llegan en dos minutos y suministran datos visuales a agentes y a la sala de control, lo que permite identificar sospechosos y reunir pruebas. La Policía Metropolitana prevé extender el programa al West End y al parque Hyde.
Las aeronaves permanecen en cajas resistentes a la intemperie ubicadas en techos de edificios policiales seleccionados, con carga completa y listas para activación remota. El personal de la sala de control evalúa la necesidad y autoriza el lanzamiento. Tras la autorización, la unidad vuela de forma autónoma hacia el incidente. Ya en posición sobre el lugar, la aeronave envía video de alta calidad en directo a dispositivos móviles de los oficiales y a monitores centrales, y registra material con fines probatorios.
Al concluir la misión, la unidad regresa por sí sola a su base. La caja se cierra de forma automática para recargar la batería y dejar el equipo preparado para el siguiente uso. Este mecanismo permite una operación continua sin intervención física inmediata en el sitio de almacenamiento. El ciclo descrito asegura disponibilidad constante para nuevos incidentes y mantiene el estándar de respuesta rápida que guía la prueba en el distrito de Islington.

El programa se aplica en incidentes diversos: localización de personas desaparecidas, rastreo de individuos buscados y obtención rápida de evidencia en el lugar. Las aeronaves entregan información situacional en tiempo real que informa decisiones de despliegue y mejora la efectividad de las respuestas. Experiencias de 2024 en Hampshire y en el Valle del Támesis sirvieron como referencia. Datos entre octubre de 2024 y marzo de 2025 registran 26.584 usos, con 721 sospechosos, 649 personas y 163 vehículos localizados.
Datos clave del despliegue de drones en Londres
- Tiempo objetivo de llegada: dos minutos desde la autorización.
 - Extensión prevista: West End y parque Hyde durante 2025.
 - Registro nacional: 26.584 usos entre octubre de 2024 y marzo de 2025.
 - Resultados: 721 sospechosos, 649 personas desaparecidas y 163 vehículos localizados.
 - Infraestructura: cajas resistentes en techos policiales con activación remota.
 
Características técnicas y comparación con helicópteros policiales

El modelo empleado corresponde a una variante comercial del DJI Matrice 4TD con capacidades térmicas. La base Dock 3 se ubica en la estación de policía de Islington. Esta configuración protege la aeronave de condiciones climáticas y mantiene su carga, lo que permite despliegues repetidos sin interrupciones. La solución prioriza disponibilidad permanente y reduce tiempos muertos entre misiones, con un esquema de almacenamiento, recarga y salida que asegura continuidad operativa en zonas de alta demanda.
Las capacidades técnicas incluyen seguimiento de objetivos en escenarios de búsqueda y persecución, además de comparación de rendimiento con métodos tradicionales de vigilancia aérea. El sistema posibilita observación precisa de escenas y apoyo a equipos en tierra con video en directo y registros para evidencias. La calidad de imagen y la estabilidad de transmisión sostienen decisiones tácticas más informadas. Este enfoque encaja en protocolos ya establecidos para incidentes que exigen confirmación visual inmediata y coordinación centralizada.
Watch the moment we located and pursued a suspect responsible for multiple robberies across Hertfordshire. After jumping over a wall in an attempt to get away, he was quickly arrested by ground units.https://t.co/T0pvXRrvEDhttps://t.co/FBgndjiHOa pic.twitter.com/oGoF0dfR0F
— NPAS South East Region (@NPASSouthEast) September 10, 2025
Frente a helicópteros policiales, las aeronaves no tripuladas llegan más rápido, generan menos ruido, requieren menor costo y causan un impacto ambiental reducido, con resultados operativos equivalentes. La menor huella acústica favorece despliegues sobre áreas densamente pobladas. La relación costo-beneficio mejora el uso de recursos. La rapidez en la puesta en el aire y el acceso a espacios reducidos fortalecen la utilidad del sistema cuando la escena necesita una visión elevada inmediata y precisa.
La comparación con la vigilancia aérea tradicional se apoya en tiempos de arribo, eficiencia energética y calidad de datos. La prueba busca medir ventajas prácticas durante emergencias y validar que el apoyo aéreo remoto mantenga rendimiento equivalente. La transmisión en tiempo real y la grabación con valor probatorio sostienen el estándar requerido. La infraestructura asociada a la Dock 3 garantiza ciclos de recarga automatizados, lo que asegura repetición de salidas con mínima latencia entre solicitudes desde la sala de control.
Marco institucional y expansión nacional del programa en Londres
La iniciativa forma parte del programa de aeronaves no tripuladas del Consejo Nacional de Jefes de Policía, que coordina esfuerzos a escala nacional. Otras policías, como Norfolk, Cleveland, West Midlands, Hampshire e Isla de Wight, y la Unidad Conjunta de Operaciones del Valle del Támesis, participan en fases de prueba similares. El conjunto descrito indica una adopción progresiva de la tecnología dentro del ámbito policial británico, con aprendizajes compartidos y referencias comunes para métricas de efectividad y seguridad.

La superintendente Taryn Evans dirige el programa a nivel nacional y la prueba en la Policía Metropolitana. La comisaria adjunta Laurence Taylor actúa como responsable nacional para aeronaves no tripuladas. Evans indicó utilidad comprobada en múltiples incidentes durante pruebas en otras regiones. Taylor afirmó apoyo a respuestas más informadas y más eficientes. Las declaraciones enmarcan el despliegue como un instrumento para acelerar decisiones y para robustecer la calidad de la información disponible antes de que unidades en tierra lleguen a la escena.
El despliegue en Londres constituye la primera implementación de este tipo en el Reino Unido, con posibilidad de extenderse a toda la capital si los resultados lo justifican. La Policía Metropolitana no reveló el número exacto de unidades ni proveedores adicionales por razones de seguridad operativa. El objetivo consiste en maximizar la rapidez de respuesta mediante apoyo aéreo remoto que complemente capacidades existentes, con énfasis en coordinación central y en entrega de imágenes útiles desde el inicio del incidente.
En noviembre de 2025, el Servicio Aéreo Policial Nacional planea evaluar la integración de modelos como el S-100 con equipos de rescate en montañas. Esta evaluación podría informar estrategias futuras para el uso de aeronaves no tripuladas en entornos complejos. La decisión de explorar esa integración conecta pruebas regionales, necesidades de rescate y estándares de seguridad. El proceso previsto busca validar procedimientos y definir límites de operación antes de cualquier ampliación hacia escenarios con terreno exigente o con acceso difícil.
			