Esta mañana continúa la búsqueda en la playa de Hatzuk, en Tel Aviv, del teléfono de la exabogada general militar, que la policía sospecha fue arrojado intencionalmente al mar cuando ella desapareció brevemente el domingo. En ese momento se temía que se hubiera autolesionado debido a la investigación en curso sobre su actuación en el caso Sde Teiman.
Yifat Tomer-Yerushalmi fue hallada con vida, pero su teléfono no apareció. Según los informes, declaró a los investigadores que no recuerda qué hizo con él.
La policía sospecha que intentó destruir pruebas incriminatorias relacionadas con el caso.
Tomer-Yerushalmi admitió haber autorizado la filtración, a mediados de 2024, de un video que mostraba el presunto abuso de un prisionero palestino en el centro de detención de Sde Teiman. Ella y otros miembros de su oficina son sospechosos de haber mentido en repetidas ocasiones sobre la filtración y de haber obstruido la investigación.