El Papa León reprueba el uso de la religión como justificación de la violencia durante un encuentro histórico con líderes cristianos de Oriente Medio. En su primera visita internacional como jefe de la Iglesia Católica, llama a superar las disputas que durante siglos dividieron a las comunidades cristianas.
Durante la conmemoración del 1.700 aniversario de un concilio eclesiástico crucial, celebrada junto a altos clérigos de Turquía, Egipto, Siria e Israel, León considera vergonzoso que los 2.600 millones de cristianos del planeta no vivan en mayor unión espiritual.
“Hoy, toda la humanidad, afligida por la violencia y la guerra, clama por la reconciliación”, declara León en la ciudad turca de Iznik, antigua Nicea, donde los primeros líderes de la Iglesia formularon el Credo Niceno que la mayoría de los cristianos aún profesan.
“Debemos rechazar firmemente el uso de la religión para justificar la guerra, la violencia o cualquier forma de fundamentalismo o fanatismo”, afirma el pontífice, primer papa originario de Estados Unidos. “Los caminos a seguir son los del encuentro fraternal, el diálogo y la cooperación”.
La ceremonia, en la que se rezó en inglés, griego y árabe, incluyó el encendido de velas junto a los restos sumergidos de una basílica del siglo IV. Este acto constituye el motivo central de la visita de cuatro días de León a Turquía, nación de mayoría musulmana.
