La policía detuvo el domingo en Jaffa a un director de escuela acusado de actos indecentes contra varios alumnos de secundaria durante un periodo de dos años. El caso generó conmoción en la comunidad educativa por la gravedad de las acusaciones y el cargo que ocupaba el sospechoso.
El hombre fue apresado en su vivienda por la unidad de delitos de la región de Ayalon bajo sospecha de acoso sexual y trasladado para ser interrogado, informó la policía. Las autoridades indicaron que el detenido debía presentarse ante el Tribunal de Magistrados de Tel Aviv para una audiencia judicial.
El sospechoso, de unos 40 años, habría acosado a entre ocho y diez estudiantes de entre 17 y 18 años, según datos difundidos por medios en hebreo. Las denuncias se presentaron tras el testimonio de varias víctimas que relataron los hechos ante los investigadores policiales.
El arresto se produjo después de que las víctimas formalizaron las denuncias, muchas de ellas ya graduadas y actualmente adultas. Los testimonios fueron recogidos por las autoridades como parte de una investigación que se desarrolla desde hace varias semanas.
Según informó el medio Walla, varios de los jóvenes declararon que el director les tocó en la zona genital. Las declaraciones forman parte del expediente policial y sustentan las acusaciones presentadas ante el tribunal.
Representantes del director que hablaron con el portal Ynet aseguraron que el sospechoso “niega completamente la acusación” y sostuvieron que el arresto resultará ser “un gran error”. Insistieron en que la investigación confirmará su inocencia.
Los allegados añadieron que el asunto se había notificado meses atrás al ayuntamiento de Tel Aviv-Yafo y a los servicios de bienestar, y sostuvieron que el caso “está relacionado con un profesor que fue despedido y busca ajustar cuentas” con la administración escolar.
El informe anual de 2024 de la Asociación de Centros de Crisis por Violación en Israel señaló un aumento del 30% en los casos de acoso o agresión sexual dentro de instituciones educativas.
De las 51.000 llamadas recibidas por los centros de asistencia, el 68% correspondía a agresiones sufridas antes de los 21 años, según el mismo documento, que destaca la vulnerabilidad de los jóvenes en el entorno académico.
