Tras la masacre ocurrida hoy en un acto de Janucá en Sídney, Australia, organizaciones de seguridad judías de Estados Unidos difundieron nuevas pautas para celebraciones en sinagogas, espacios públicos y centros comunitarios. Buscan reforzar la protección y reducir la exposición pública de las actividades comunitarias.
La Red Comunitaria Segura, la Iniciativa de Seguridad Comunitaria y el Servicio de Seguridad Comunitaria, tres grupos clave en Estados Unidos, aconsejan coordinar cada acto con la policía y expertos locales. Proponen ampliar al máximo el perímetro y admitir solo invitados identificables y preseleccionados, sin invitaciones masivas.
El documento exige registro y verificación de todos los asistentes. Los organizadores deben entregar datos como hora y lugar solo después de completar ese proceso. También pide controles de acceso en todos los actos, con puertas cerradas y vigilancia en entradas, más avisos inmediatos ante cualquier conducta sospechosa.
Para elevar la protección, el texto contempla agentes armados, en servicio o fuera de servicio, más seguridad privada y equipos voluntarios. Las Federaciones Judías de Norteamérica y la Liga Antidifamación avalan las pautas. Los grupos ya difundieron guías similares tras amenazas y ataques contra judíos estadounidenses en años recientes.
Las instituciones judías del país han incrementado medidas de seguridad de forma constante frente a peligros persistentes. En Nueva York, autoridades de la ciudad y del estado anunciaron un refuerzo de la protección policial en actividades de la comunidad judía, a raíz del ataque registrado en Australia.
