Funcionarios franceses, saudíes y estadounidenses se reunirán hoy en París con el jefe del ejército libanés para ultimar una hoja de ruta que establezca un mecanismo de desarme del grupo terrorista Hezbolá, según informaron diplomáticos.
La reunión se planificó en medio de temores de que Israel pudiera lanzar una nueva operación militar contra el grupo respaldado por Irán tras el vencimiento, el 31 de diciembre, del plazo fijado para su desarme.
Los ataques israelíes contra la infraestructura y las actividades de Hezbolá han continuado durante más de un año desde la entrada en vigor del alto el fuego entre ambas partes. El acuerdo exigía que tanto Israel como Hezbolá abandonaran el sur del Líbano y que sus posiciones fueran ocupadas por el ejército libanés. Israel se retiró de todos los puestos estratégicos a lo largo de la frontera, salvo cinco, y sostiene que sus ataques apuntan a impedir que Hezbolá recupere su capacidad militar tras la guerra. Afirma además que el ejército libanés no avanza con la suficiente rapidez para desarmar al grupo terrorista.
En ese contexto, el objetivo de la reunión de hoy, según indicó un funcionario el martes, consiste en “compartir impresiones” sobre la forma de evitar un nuevo estallido de guerra en el Líbano.
Estados Unidos estará representado por Morgan Ortagus, representante especial estadounidense para el Líbano, mientras que la delegación francesa estará encabezada por Anne-Claire Legendre, asesora para Oriente Medio del presidente francés Emmanuel Macron.
El encuentro busca crear condiciones más sólidas para identificar, respaldar y verificar el proceso de desarme, así como disuadir a Israel de una escalada, según indicaron a Reuters cuatro diplomáticos y funcionarios europeos y libaneses.
Con elecciones legislativas previstas para 2026 en el Líbano, existen temores de que la parálisis política y las disputas partidistas incrementen la inestabilidad y reduzcan la disposición del presidente libanés, Joseph Aoun, a impulsar el desarme, señalan diplomáticos y funcionarios.
“La situación es extremadamente precaria, llena de contradicciones, y no se necesitará mucho para encender el polvorín”, afirmó un alto funcionario bajo condición de anonimato.
Dado que el ejército libanés carece de capacidad para desarmar a Hezbolá, la propuesta pasa por reforzar el mecanismo de alto el fuego vigente con expertos militares franceses, estadounidenses y, posiblemente, de otros países, junto con fuerzas de paz de la ONU, según explican diplomáticos y funcionarios.
Las partes esperan organizar una conferencia a comienzos del próximo año para fortalecer al ejército libanés, así como otra conferencia independiente destinada a apoyar la reconstrucción, especialmente en el sur del Líbano.
