El Senado de Estados Unidos aprobó el miércoles la renominación del multimillonario Jared Isaacman, propuesta por el presidente Donald Trump, para encabezar la NASA. La decisión llegó tras meses de idas y vueltas, con dudas sobre el rumbo de la agencia espacial y su liderazgo.
El empresario judío, de 42 años, amasó su fortuna en el negocio del procesamiento de pagos online y mantiene una afición personal por el espacio. Asume como administrador en una etapa sensible, marcada por recortes presupuestarios y por la exigencia de regresar a la Luna y luego avanzar hacia Marte.
La administración Trump quiere acelerar una misión tripulada estadounidense a la Luna para anticiparse a iniciativas similares de China. Ese objetivo forma parte de la estrategia política del gobierno, que busca fijar plazos cortos y mostrar liderazgo tecnológico frente a su competencia internacional.
En su segunda audiencia de confirmación, celebrada en diciembre, Isaacman aseguró que protegería el éxito del programa lunar Artemis. Esa iniciativa comenzó en 2017, durante la primera administración Trump, y se convirtió en la principal hoja de ruta de Estados Unidos para volver a la superficie lunar.
“Estados Unidos volverá a la Luna antes que nuestro gran rival, y estableceremos una presencia duradera para comprender y realizar el valor científico, económico y de seguridad nacional en la superficie lunar”, dijo Isaacman. Con esa frase, vinculó el retorno lunar con metas científicas, económicas y de seguridad nacional.
Artemis, sin embargo, arrastra múltiples demoras y ajustes de calendario. En septiembre, expertos alertaron que el módulo lunar que desarrolla SpaceX, la empresa de Elon Musk, podría no alcanzar los plazos previstos, lo que añade presión sobre el cronograma oficial de la NASA.
Trump había nominado a Isaacman tras su triunfo en las elecciones de 2024. Más tarde, retiró el nombre en abril de 2025, en medio de un choque con Musk, y volvió a presentarlo en noviembre, lo que reabrió el proceso de confirmación en el Senado.
Musk empujó para que Isaacman obtuviera el cargo, y el episodio exhibió la relación cambiante del presidente con el fundador de SpaceX. Musk se mostró escéptico respecto al plan de regresar a la Luna, y en ocasiones priorizó la ambición de apuntar directo a Marte.
Aunque la administración Trump contempló meses atrás la posibilidad de revisar Artemis para privilegiar Marte, ese escenario perdió fuerza. Isaacman sostuvo que el retorno a la Luna figura ahora como prioridad, y esa definición reduce el margen para un giro inmediato de la estrategia.
El emprendedor dejó el instituto y construyó su carrera por fuera de la ruta académica tradicional. Voló dos veces con SpaceX y, en 2024, se convirtió en el primer astronauta privado que realizó una caminata espacial, un antecedente que refuerza su perfil público.
Isaacman no convirtió su identidad judía en un eje central de su proyección mediática. El año pasado, él y su padre, Don, integrante de la junta de Shift4, aparecieron entre decenas de nombres en un comité de gala de Chabad del condado de Hunterdon, en Nueva Jersey.
En 2021, al convertirse en el primer turista espacial estadounidense en el Crew Dragon de SpaceX, dijo a CNN que no pensaba observar Yom Kipur desde el espacio, ya que la festividad coincidió con la fecha de su lanzamiento, en plena cobertura mediática del vuelo.
Isaacman agregó que “en realidad no es una persona religiosa”, y a la vez señaló que aporta a una sinagoga en Nueva Jersey. La declaración buscó describir su relación con la práctica religiosa, sin presentarla como un componente central de su vida pública.
En 2010, Isaacman donó a una subasta de Chabad la posibilidad de ser “Piloto de Combate por un Día” en uno de sus aviones. El gesto se sumó a otras participaciones vinculadas a la organización, dentro de un marco social y comunitario local.
Isaacman no sería el primer director judío de la NASA. El expresidente George H.W. Bush eligió en 1992 a Daniel S. Goldin, un ingeniero que participó en el movimiento para liberar a la comunidad judía soviética, y le encargó la conducción de la organización.
