Familias, defensores legales y simpatizantes de activistas propalestinos presos en Gran Bretaña, actualmente en huelga de hambre, lanzaron un llamado urgente al gobierno. Alertaron que sus allegados afrontan un riesgo vital inmediato y reclamaron una intervención oficial ante un deterioro físico que consideran extremo irreversible.
Ocho personas se sumaron a la huelga, algunas desde comienzos de noviembre. Abogados sostienen que la salud de seis participantes, con edades entre 20 y 31 años, se agrava con rapidez y que la muerte resulta probable sin acción estatal. Uno mantiene una huelga parcial por diabetes.
Qesser Zuhrah ingresó en un hospital el miércoles tras 46 días sin comer, informó el grupo Defend Our Juries. “Su corazón está cediendo y su pulso se está ralentizando. ¿Entonces qué esperamos?” afirmó Shahmina Alam, hermana de Kamran Ahmed, de 28 años, en huelga desde hace 39 días.
Cuatro activistas quedaron presos por una presunta implicación en un allanamiento a una firma de defensa vinculada a Israel el año pasado. Otros cuatro afrontan cargos por irrumpir en una base aérea en Inglaterra. Todos han sido acusados en nombre de Acción Palestina, antes de su prohibición como organización terrorista.
Un portavoz de Keir Starmer indicó que el gobierno supervisa su bienestar. Palestine Action fue prohibida en julio, equiparada al Estado Islámico o Al Qaeda. Datos oficiales registran 1.886 arrestos por terrorismo hasta septiembre de 2025, con 1.630 vinculados al apoyo a Acción Palestina protestan.
