El ministro de Defensa, Israel Katz, dictó una orden de detención administrativa contra un israelí beduino bajo sospecha de introducir grandes volúmenes de armas en Israel, según informaron la policía y el Shin Bet. El hombre, de Bir Hadaj, figura como “contrabandista central de armas” y usó drones.
La decisión supone un uso inusual de la detención administrativa para delitos penales y no vinculados a la seguridad nacional. Las autoridades destacaron el carácter “revolucionaria” de la orden. El sospechoso quedó retenido en “ausencia de una alternativa criminal”, junto a su “significativa implicación” en contrabando transfronterizo.
A comienzos de año, Katz dispuso el fin de esta práctica contra sospechosos judíos, lo que generó acusaciones de discriminación estatal, ya que continúa contra palestinos y algunos árabes israelíes. La policía alerta que el aumento del contrabando amenaza la seguridad nacional y puede abastecer a grupos terroristas.
