Representantes de Europa, China y Rusia, naciones que aún están comprometidas con el acuerdo nuclear de Irán, planean reunirse con el representante de Irán en Viena el domingo para discutir cómo salvar el acuerdo.
Los diplomáticos pretenden examinar cuestiones relacionadas con la aplicación del acuerdo nuclear una vez que Irán haya superado los límites de existencias y enriquecimiento establecidos en el acuerdo.
Irán recientemente comenzó a superar los límites de enriquecimiento de uranio en el acuerdo nuclear de 2015, diciendo que estas medidas pueden revertirse si las otras partes del acuerdo, Alemania, Francia, Reino Unido, China, Rusia y la Unión Europea, ofrecen suficientes incentivos económicos para compensar las sanciones de EE.UU. que el presidente de EE.UU., Donald Trump, reinstaló después de retirar a su país del acuerdo nuclear.
Los expertos advierten que un mayor enriquecimiento y una reserva creciente reducen el plazo de un año para que Irán tenga suficiente material para fabricar una bomba atómica, algo que Irán niega querer, pero el acuerdo lo impidió.
La semana pasada, las autoridades francesas, en una reunión con un enviado iraní, subrayaron la necesidad de que Teherán respete rápidamente el acuerdo nuclear de 2015 que ha incumplido y “haga los gestos necesarios” para reducir las crecientes tensiones en la región del Golfo Pérsico.
Irán ha tomado medidas cada vez más provocativas contra los barcos en el Golfo, incluyendo la incautación de un petrolero británico y el derribo de un dron estadounidense.
Los Estados Unidos han ampliado su presencia militar en la región y se teme que el conflicto se extienda cada vez más.
Trump retiró a los Estados Unidos del acuerdo el año pasado unilateralmente, diciendo que quería negociar uno mejor.
En virtud de las disposiciones del acuerdo, los signatarios proporcionaron a Irán un alivio de las sanciones económicas a cambio de frenar el programa nuclear del país, pero las últimas sanciones de EE.UU. han puesto de manifiesto la incapacidad de los europeos, así como de Rusia y China, para cumplir con sus compromisos.
Las recientes medidas de Irán, que defiende como permisibles tras la retirada de Estados Unidos, se consideran una forma de obligar a los demás a enfrentarse abiertamente a las sanciones.
Al mismo tiempo, Europa está bajo la presión de Estados Unidos para que abandone el acuerdo nuclear con Irán, el Plan de Acción Integral Conjunto, o JCPOA, como se conoce formalmente el acuerdo, y también está siendo presionada por Irán para contrarrestar los efectos siempre nefastos de las sanciones económicas estadounidenses.
Esto ha dejado el enfoque de poder débil de los europeos forzado hasta sus límites en un momento de crecientes tensiones en Medio Oriente.