Los mulás de Irán están desesperados. Las sanciones económicas están diezmando la economía. La sequía severa fue seguida por inundaciones igualmente severas y ambas fueron manejadas muy mal por las autoridades. Las manifestaciones contra el gobierno continúan ocurriendo constantemente en todo el país. Los clérigos del centro religioso de Qom están criticando al gobierno, siguiendo el ejemplo del líder chií de Irak, Ali Sistani. Los disturbios étnicos continúan en las regiones baluchi, árabe y kurda. Persisten rumores de conflicto entre las fuerzas armadas y la Guardia Revolucionaria.
El gobierno iraní ha respondido a las sanciones amenazando con bloquear el Estrecho de Ormuz, que pondría fin a las exportaciones de petróleo y GNL de Arabia Saudita y del Golfo (y las suyas propias). En respuesta, el gobierno estadounidense ha enviado una poderosa flotilla naval y aérea al Golfo.
En otras palabras, la situación es perfecta para que un incidente, accidente o provocación desate una guerra abierta. El resultado militar es una conclusión inevitable: las fuerzas navales y aéreas iraníes serían aniquiladas y la infraestructura civil y militar iraní sería destruida … Las bombas destructoras de búnkers destruirían las instalaciones nucleares.
Se ha puesto demasiado énfasis en el presunto ocultamiento del ejército estadounidense; sigue siendo, con mucho, el más poderoso del mundo.
Los iraníes lo saben y, presumiblemente, intentarán evitar un choque directo. En su lugar, desatarán sus fuerzas de poder, como ya lo han hecho con los hutíes en Yemen, atacando a los buques y oleoductos saudíes. Es muy posible, tal vez probable, que los iraníes ordenen a Hamás y Hezbolá que ataquen a Israel simultáneamente, aprovechando el hecho de que Israel está atravesando una crisis política y constitucional.
¿Debería llevarse a cabo, atacarían los estadounidenses a Irán? Sería una buena excusa para acabar con la amenaza iraní de una vez por todas, pero de ninguna manera es seguro. Cualquiera que sea la respuesta, Israel se enfrentará a una situación extremadamente peligrosa y podría tener que enfrentarla solo. Tal vez tal desarrollo convencerá a los “líderes” del país para que dejen de lado sus maniobras políticas mezquinas y se unan ante un posible desastre.