Adidas confirmó la venta del último par de zapatillas Yeezy en el cuarto trimestre, dando por finalizado el proceso de liquidación de la icónica línea creada con el rapero Ye, anteriormente Kanye West. La compañía rompió lazos con el artista en octubre de 2022 tras sus declaraciones antisemitas.
Desde entonces, la marca deportiva ha intentado distanciarse de la polémica, aunque la pérdida de la asociación afectó significativamente sus ingresos, y provocó pérdidas anuales en 2023. La liquidación de los Yeezy comenzó en mayo de 2023, con el compromiso de donar parte de las ganancias a organizaciones que combaten el antisemitismo, como la Liga Antidifamación.
En 2024, las ventas de Yeezy generaron 650 millones de euros (690 millones de dólares), con beneficios de aproximadamente 200 millones de euros. Esto representó una caída respecto al año anterior, cuando Adidas reportó ingresos de 750 millones de euros y 300 millones en ganancias operativas.

Mientras Adidas cerraba la etapa Yeezy, Ye volvió a generar controversia con un anuncio transmitido durante algunas emisiones locales del Super Bowl el 11 de febrero. Grabado con un iPhone, el rapero hablaba de sus nuevos dientes y dirigía a los espectadores a Yeezy.com. Al día siguiente, el sitio solo ofrecía un producto: una camiseta blanca con una esvástica, a la venta por 20 dólares.
Bajo la etiqueta “HH-01”, la prenda utilizaba una abreviatura vinculada a grupos neonazis para “Heil Hitler”. Este lanzamiento se sumó a sus recientes declaraciones antisemitas, incluyendo comentarios en la red social X donde expresó admiración por Adolf Hitler. Su cuenta en la plataforma fue desactivada tras varios días de publicaciones de odio, aunque no se aclaró si la suspensión fue voluntaria o ejecutada por la compañía.
La Liga Antidifamación condenó el hecho, señalando que la esvástica sigue representando una amenaza para las comunidades afectadas por el antisemitismo. También criticaron el uso del Super Bowl como plataforma para amplificar este mensaje ante una audiencia masiva.
Ye, quien en el pasado reveló un diagnóstico de trastorno bipolar, ha llegado a afirmar que los médicos judíos conspiraron en su contra. En una reciente entrevista, cambió su versión y aseguró que en realidad es autista.
En sus últimos mensajes, también expresó apoyo a Sean “Diddy” Combs, actualmente encarcelado por tráfico sexual, y reafirmó su autoproclamación como “nazi”. Hasta el momento, la red social X no ha emitido ninguna declaración oficial sobre la suspensión de su cuenta.