La canciller saliente de Alemania, Angela Merkel, fue galardonada el martes con la Medalla Buber-Rosenzweig, en honor a su defensa contra el antisemitismo y el racismo en la política, la sociedad y la cultura.
“Es nuestra tarea permanente fortalecer y proteger la vida judía en Alemania”, dijo Merkel. “Considero la concesión de la medalla Buber-Rosenzweig como un honor, pero sobre todo en estos tiempos también como un incentivo para nuestro compromiso permanente con los valores de nuestra democracia, con la tolerancia y la dignidad del individuo. Respetarlos es también un requisito para la cohesión de nuestra sociedad”.
En un discurso pronunciado en la ceremonia de entrega, Merkel exigió a la sociedad que utilice todos los medios disponibles para defenderse de los actos de racismo, antisemitismo y cualquier forma de prejuicio.
Ataques como el de la sinagoga de la ciudad de Halle, en el centro de Alemania, en octubre de 2019, las protestas antisemitas frente a las sinagogas, la banalización del Holocausto en las manifestaciones contra las medidas de lucha contra la pandemia del coronavirus y las repetidas agresiones a los hombres que llevan kipás no deben ser nunca toleradas, dijo.
La ceremonia estaba originalmente prevista para 2020, pero se había pospuesto varias veces debido a la pandemia de coronavirus. El presidente del Consejo Central de los Judíos de Alemania, Josef Schuster, subrayó que, sin embargo, ahora era un buen momento para reconocer a la canciller, porque se podía apreciar todo el mandato de Merkel. Merkel dejará el cargo en septiembre, tras 16 años en el poder.
En la ceremonia, Schuster se refirió a la “solidaridad” de Merkel con Israel, su defensa de la libertad religiosa y su compromiso contra el antisemitismo, que, según dijo, están arraigados en una auténtica determinación, independientemente de la política.
“Uno también se aferra a estas convicciones cuando no es popular, cuando es muy criticado por ello o cuando hay contratiempos”, señaló Schuster. “En tiempos en los que, por desgracia, el populismo político suele ser recompensado con muchos votos, esta firmeza se aprecia más que nunca”.
El premio, que se concede a personas que contribuyen activamente a fomentar el diálogo judeo-cristiano, fue presentado por el Consejo Coordinador Alemán de Sociedades para la Cooperación Judeo-Cristiana (DKR), una organización con sede en Berlín que representa al menos a 44 organizaciones diferentes.
El nombre de la medalla honra la memoria de Martin Buber, filósofo, traductor y educador austriaco-judío, y de Franz Rosenzweig, teólogo alemán-judío. Desde 1968, otros galardonados han sido el ex ministro de Asuntos Exteriores alemán Joschka Fischer, el ex presidente alemán Richard von Weizsäcker, el director de orquesta Daniel Barenboim, el arquitecto Daniel Libeskind y el escritor Gyorgy Konrad.