Manifestantes en Columbia exigen una “intifada”, desatando tensiones entre estudiantes judíos que denuncian antisemitismo y actos en apoyo a Hamás en el campus.
Estudiantes judíos en Columbia enfrentan creciente clima de hostilidad
En su primer día en la Universidad de Columbia, la estudiante Shoshana Aufzien fue sorprendida por cánticos que exigían una “intifada”. Aunque ya esperaba este tipo de manifestaciones, decidió protestar pacíficamente junto a un amigo. Durante las protestas, muchos manifestantes propalestinos portaban carteles alusivos a la propaganda de Hamás, lo que incrementó la tensión en el campus.
A pesar de los esfuerzos de la universidad por abordar las denuncias de antisemitismo, los estudiantes judíos afirmaron que el ambiente en el semestre de otoño de 2024 sigue siendo similar al de la primavera pasada. Eden Yadegar, presidenta de Estudiantes que Apoyan a Israel, describió el ambiente como tenso y cargado de hostilidad.
En las primeras horas del semestre, manifestantes antiisraelíes pintaron de rojo la estatua del Alma Mater, un símbolo icónico del campus. Además, hubo sentadas no autorizadas y la distribución de panfletos que incitaban a romper vínculos con universidades israelíes.
Protestas prorradicales intensifican las tensiones en Columbia
Un informe de la Liga Antidifamación, publicado en septiembre, detalló más de 2.000 incidentes antiisraelíes en universidades estadounidenses entre junio de 2023 y mayo de 2024. Columbia ha sido un punto central en las protestas, con manifestaciones prorradicales que han generado un intenso debate sobre los límites de la libertad de expresión.
Durante el último año, los estudiantes judíos en Columbia han reportado acoso constante, aislamiento y actos de odio. Algunos manifestantes incluso bloquearon el acceso al campus a aquellos que percibían como “sionistas”, limitando sus derechos de acceso.
Las protestas propalestinas, que incluyen cánticos en apoyo de una “intifada global”, son vistas por muchos como incitación directa a la violencia. Además, manifestaciones con lemas como “del río al mar” han sido interpretadas como un llamado al desmantelamiento de Israel y a la expulsión de sus habitantes judíos.
Grupos propalestinos en campus intensifican retórica contra Israel
El informe de la ADL destacó a grupos universitarios como Estudiantes por la Justicia en Palestina y Voz Judía por la Paz como responsables de gran parte de las actividades antiisraelíes en campus. Estos grupos han expresado abiertamente su apoyo a organizaciones terroristas como Hamás y Hezbolá, según el informe.
Durante la orientación del semestre, manifestantes propalestinos distribuyeron manifiestos que pedían boicotear a Israel. En una feria de clubes, algunos estudiantes también reportaron la distribución de folletos que comparaban al Departamento de Policía de Nueva York con el Ku Klux Klan, lo que provocó indignación entre los estudiantes judíos.
Las tensiones entre los grupos propalestinos y los estudiantes judíos continúan escalando, mientras las autoridades universitarias intentan mantener el orden y la seguridad en el campus. Sin embargo, muchos estudiantes como Shoshana Aufzien denuncian que la universidad no ha tomado las medidas suficientes para frenar el antisemitismo.
Protestas y retórica radical desafían la convivencia en Columbia
Las manifestaciones no solo han generado confrontaciones verbales, sino también han afectado el entorno académico. Los estudiantes han reportado interrupciones durante las clases debido a las fuertes protestas en las calles del campus.
Maya Cukierman, estudiante de primer año, expresó su preocupación por la orientación sobre antisemitismo e islamofobia, afirmando que solo se abordó una de estas problemáticas. A su juicio, se justifica el uso de frases como “del río al mar”, lo que refuerza la retórica antisemita.
A pesar de los intentos de la universidad por fomentar la convivencia pacífica, las tensiones persisten. La administración ha adoptado medidas de seguridad adicionales, como restringir el acceso a ciertas áreas del campus, para evitar que las protestas afecten aún más el inicio del semestre.
Medidas de seguridad en Columbia no calman tensiones entre estudiantes
Las puertas de la universidad permanecen cerradas, permitiendo el acceso al campus únicamente bajo la supervisión de seguridad pública. Aunque las protestas no han alcanzado el nivel del año pasado, los estudiantes temen que la situación empeore a medida que se acerca la conmemoración del 7 de octubre.
Eden Yadegar subrayó la resiliencia de los estudiantes judíos, quienes, a pesar del clima hostil, siguen decididos a continuar con sus estudios y no dejarse intimidar por las manifestaciones. “Solo queremos ir a clase y no ser intimidados”, concluyó.