Concejales de la ciudad de Pamplona, capital de la provincia de Navarra en el norte de España, han pedido al gobierno español que detenga su comercio de armas con Israel y declarar en su municipio a los funcionarios israelíes como «personas no gratas» hasta que Israel detenga su «opresivo» política contra el pueblo palestino«.
La resolución aprobada por los jefes de las facciones en el municipio de Pamplona también expresó su apoyo al derecho palestino de retorno y al derecho de los palestinos a realizar una protesta pacífica «que ha sido suprimida con fuerza por el ejército israelí».
El municipio de Pamplona condenó a las FDI por matar al menos a 100 palestinos y herir a miles durante las manifestaciones «no violentas» de «Marcha del Retorno» y ofreció su apoyo y condolencias a las familias de las víctimas.
La resolución también hace un llamado a los gobiernos de la Unión Europea para que incrementen la presión e impongan sanciones a Israel para obligarlo a detener su «agresión» contra el pueblo palestino.
Además criticaron la decisión de Estados Unidos de trasladar su embajada a la «Jerusalén ocupada» y describieron esta medida como extremadamente peligrosa y en contravención de la ley internacional.
La resolución fue aprobada a pesar de no recibir apoyo del Partido Socialista, que tiene la mayoría en el municipio. Fue respaldado por el Partido Nacionalista Vasco, el partido radical de izquierda Podemos y el Partido Comunista.
La resolución aún necesita recibir la aprobación del pleno del municipio.
La embajada de Israel en Madrid condenó la resolución y recordó a Pamplona que «el Reino de Navarra fue el último de la península en expulsar a sus judíos, y el Ayuntamiento de Pamplona fue el primero en declararnos personas no gratas.
Navarra 1498: judíos fuera – Pamplona 2018: nos prohíben la entrada.@PamplonaIruna @josebaasiron @fcjecom #judíos #Israel #Pamplona #Navarra pic.twitter.com/7Jibfja6fa
— Israel en España 🇮🇱 (@IsraelinSpain) June 19, 2018
La resolución de Pamplona es la última de una tendencia más amplia que la Embajada de Israel ha presenciado en España en diferentes aspectos –municipal, cultural y académico– que está cobrando impulso a la luz de los recientes acontecimientos en Gaza y los cambios políticos en el país: el despido de El primer ministro Mariano Rajoy por un voto de desconfianza y el nombramiento de un nuevo líder, el primer ministro Pedro Sánchez, del Partido Socialista Obrero Español (SWP).
Los socialistas, para sobrevivir, deben mantener el apoyo de sus socios de la coalición, el partido de izquierda radical Podemos, que ha estado a la vanguardia de todas las iniciativas de boicot israelíes en los municipios de toda España y exige una línea dura contra Israel.
Recientemente, la ciudad de Oviedo, la capital de la región española de Asturias, decidió cancelar un concierto de la Orquesta NK de Israel, citando razones políticas. Oviedo también canceló una actuación de ballet israelí.
El municipio de Valencia, también gobernado por una coalición de izquierda formada por el partido Podemos y el SWP, aprobó a principios de mes la decisión de declararse como un lugar «limpio del apartheid israelí», que boicoteará a Israel tanto cultural como económicamente.
Durante la votación, 17 de cada 33 miembros del municipio apoyaron la decisión, mientras que 16 se opusieron. La propuesta oficial expresó solidaridad y apoyo completo para los palestinos mientras criticaba vehementemente a Israel.
Pablo Iglesias Turrión, el líder de Podemos, el tercer partido más grande de España, dijo a un canal de televisión que Israel es un Estado criminal, «España necesita actuar de manera más decisiva contra un estado ilegal como Israel. Nuestro partido define la existencia de Israel como ilegítimo«, afirmó Turrión.
ACOM, un grupo pro-israelí en España, dijo que los sentimientos de Turrión son antisemitas ya que su partido no llama a ningún otro estado además de Israel como «ilegal». La organización anunció que han presentado una demanda contra el municipio de Valencia.
Los tribunales españoles, incluido el Tribunal Supremo, han desestimado 16 decisiones de boicot contra Israel que se aprobaron a nivel municipal. Otros siete municipios han revertido la decisión voluntariamente.