Más de 300 estudiantes judíos y sus aliados de diversas universidades, junto con líderes comunitarios, figuras influyentes y funcionarios, participaron en un evento organizado en Midtown Manhattan. La cumbre “Rise & Respond: Cumbre estudiantil mundial contra el antisemitismo”, promovida por el Movimiento de Combate al Antisemitismo (CAM), reunió a representantes de todo el mundo el domingo.
El foro permitió a los asistentes compartir experiencias y abordar el incremento alarmante de ataques antisemitas en instituciones educativas de América del Norte y otros continentes. La reunión destacó la creciente preocupación por la hostilidad dirigida contra la comunidad judía en los campus universitarios.
Durante la cumbre, CAM presentó la Iniciativa FACE contra el Antisemitismo, que establece diez medidas concretas para que profesores y legisladores enfrenten esta problemática. Entre las exigencias se incluye la adopción universal de la definición de antisemitismo de la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (IHRA) en todas las universidades, la creación de un proceso de denuncia claro y accesible para reportar ataques antisemitas y la designación de un punto de contacto específico para estudiantes y docentes afectados. También se propuso la implementación de programas educativos obligatorios sobre antisemitismo y la transparencia total en la financiación proveniente de gobiernos y ONG extranjeras.
Otra de las medidas exige que las administraciones universitarias rechacen públicamente el movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) y que investiguen actividades de grupos identificados como organizaciones de odio dentro de los campus. Entre los señalados se encuentran Estudiantes por la Justicia en Palestina, Facultad por la Justicia en Palestina, Musulmanes Estadounidenses por Palestina, Estudiantes por una Sociedad Democrática (SDS), Jóvenes Socialistas Democráticos de América (YDSA) y Dissenters.
CAM también presentó el Mapa y Plataforma de Defensa HEAT, una herramienta creada para identificar y denunciar a profesores, administradores e intelectuales que promueven discursos antisemitas y antiisraelíes. Esta plataforma documentará sus acciones y limitará su capacidad de influir en el pensamiento académico a través del adoctrinamiento y la intimidación. Su objetivo es exponer a quienes faciliten o inciten el antisemitismo en las universidades y garantizar que asuman su responsabilidad.
El sistema ofrecerá un monitoreo visual en tiempo real de estos individuos dentro de las instituciones, con perfiles detallados sobre su impacto ideológico y acciones. Se estructurará como una base de datos dinámica donde se registrarán incidentes verificados y se vincularán con los responsables de promover discursos de odio y racismo.
Sacha Roytman Dratwa, director ejecutivo de CAM, calificó la cumbre como un punto de inflexión en la lucha global contra el antisemitismo. “Con la Iniciativa FACE contra el Antisemitismo, hemos desarrollado un plan de acción sin precedentes que exige responsabilidad a las universidades y protege a los estudiantes judíos y proisraelíes”, afirmó.
Las herramientas proporcionadas, agregó Roytman Dratwa, buscan erradicar la impunidad en los campus universitarios, donde grupos hostiles atacan edificios, interrumpen clases y buscan silenciar a estudiantes y profesores judíos. “Las universidades deben implementar estas medidas para recuperar su esencia como espacios de aprendizaje y no como escenarios de confrontación”, sentenció.
Los asistentes también debatieron estrategias para frenar el antisemitismo y generar cambios significativos en los campus. La urgencia de estas acciones se intensificó tras el ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre. Un informe del Centro de Investigación del Antisemitismo de CAM reveló 742 incidentes antisemitas en campus de Estados Unidos en 2024, reflejando un alarmante aumento del 120,8 % respecto a los 336 casos registrados en 2023.
El evento resultó especialmente relevante en el contexto de la crisis de antisemitismo en la Universidad de Columbia y la reciente intervención del gobierno de Trump. La nueva administración impulsó acciones federales para exigir a Columbia y otras instituciones educativas que protejan a estudiantes y docentes judíos de la discriminación, el acoso y la violencia.
Uno de los momentos más significativos de la cumbre fue el reconocimiento a Michael Kaminsky, estudiante de tercer año en la Universidad DePaul, con el Premio al Activismo Estudiantil de CAM. Kaminsky sufrió una agresión física a plena luz del día en su campus, perpetrada por atacantes enmascarados, mientras un guardia de seguridad observaba sin intervenir. Lejos de intimidarse, Kaminsky reforzó su activismo en defensa de la comunidad judía e instó a los asistentes a resistir el odio y mantener viva la resiliencia de su pueblo.
“Ese día comprendí el sufrimiento que mi familia soportó bajo el régimen nazi y soviético. Decidí que debía canalizar la fortaleza que me legaron”, expresó Kaminsky. “No me escondí. Hablé. La historia recordará a quienes defendieron los derechos civiles y condenará a quienes permanecieron indiferentes ante las atrocidades. No somos judíos que tiemblan de miedo”.
La congresista estadounidense Claudia Tenney (NY-24) respaldó las acciones federales contra el antisemitismo en las universidades y subrayó la necesidad de enfrentar el odio. Mostró una pulsera que le entregó la sobreviviente del Holocausto Helen Sperling con la frase: “No serás un espectador”.
Entre los oradores destacados de la cumbre se encontraban líderes comunitarios, empresarios, activistas y funcionarios de diversos países. Sus discursos abordaron el crecimiento del antisemitismo, la urgencia de combatirlo y los retos que enfrenta el pueblo judío. Cada intervención destacó la importancia de la unidad en la lucha contra el odio y ofreció reflexiones sobre la batalla continua por la justicia y la igualdad.
Sheryl Sandberg, exdirectora de operaciones de Meta Platforms, advirtió que la desinformación sobre Israel, el pueblo judío y el terrorismo ha llevado a esta crisis de antisemitismo. “Esta lucha no solo nos afecta a nosotros. Protege nuestra forma de vida. Por eso, la batalla contra el odio y la defensa de nuestra comunidad es más crucial que nunca”, señaló.
Danny Danon, embajador de Israel ante la ONU, exhortó a los jóvenes a actuar con firmeza. “Si sus universidades no los protegen, exíjanles rendición de cuentas. Si los gobiernos estudiantiles impulsan resoluciones antiisraelíes, enfréntenlas. Si intentan borrar la verdad, recuérdenles que estamos aquí. El pueblo judío jamás ha dejado de luchar y no lo hará ahora”.
El vicealcalde de Seguridad Pública de Nueva York, Kaz Daughtry, aseguró que la administración de Eric Adams defiende la libertad de expresión y la democracia, pero advirtió sobre los límites del discurso de odio. “Cuando las protestas paralizan nuestra ciudad y el discurso cruza la línea hacia el odio, haré que todos rindan cuentas”, afirmó.
Montana Tucker, activista proisraelí e influencer en redes sociales, cerró con un mensaje de fortaleza para los jóvenes judíos. “Este es tu momento. Llevas en la sangre miles de años de supervivencia y resiliencia. Eres parte de una historia que jamás será borrada. Tu voz puede marcar la diferencia”.