Una resolución judicial frenó de forma temporal la deportación de Rumeysa Ozturk, estudiante turca de doctorado en la Universidad de Tufts, luego de ser arrestada por autoridades migratorias de Estados Unidos. Ozturk, de 30 años, fue detenida el martes cerca de su residencia en Massachusetts por agentes federales enmascarados, según muestra un video que captó el momento del arresto. Su visa fue revocada.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) la acusa de apoyar actividades relacionadas con Hamás, grupo que el gobierno estadounidense clasifica como “organización terrorista extranjera”, sin presentar pruebas que respalden dicha acusación.
Pese a una orden emitida la noche del martes que exigía no trasladarla fuera de Massachusetts sin una notificación previa de 48 horas, Ozturk ya fue llevada a Louisiana. En respuesta, la jueza federal de distrito Denise Casper dictó una nueva orden que impide su deportación mientras se evalúa si el tribunal tiene competencia sobre el caso.
El fallo también obliga a la administración de Donald Trump a responder a la demanda presentada por la defensa antes del martes. La abogada de Ozturk, Mahsa Khanbabai, consideró la decisión como un avance para que su clienta pueda volver a Boston y retomar sus estudios como becaria Fulbright.
El DHS no ofreció declaraciones. Simpatizantes de Ozturk denuncian que su arresto representa el primer caso de detención migratoria de un estudiante en el área de Boston vinculado al activismo propalestino bajo el actual gobierno. Diversos estudiantes extranjeros han sido blanco de medidas similares tras participar en manifestaciones críticas hacia Israel.
Estas detenciones han sido señaladas como un ataque a la libertad de expresión. No obstante, el gobierno de Trump sostiene que algunas de estas protestas contienen elementos antisemitas y representan una amenaza para la política exterior del país.