La Universidad Estatal de California, Los Ángeles, enfrenta una toma de un edificio por parte de manifestantes anti-Israel, mientras la policía del campus monitorea la situación y los empleados se refugian en su lugar, según un funcionario.
El portavoz de la universidad, Erik Frost Hollins, informó que un grupo de 50 a 100 personas bloqueó las salidas del primer piso y obstaculizó los caminos alrededor del edificio, lo que llevó a la universidad a pedir a los empleados que se refugiaran en el lugar, según reporta The Los Angeles Times.
La oficina del presidente de la universidad se encuentra en el edificio, pero Hollins no confirmó si ella estaba entre las personas dentro. La universidad publicó una “alerta de acción de protesta” en su sitio web, anunciando que todas las clases y operaciones del campus principal serían remotas hasta nuevo aviso y solicitando a las personas no acudir al campus principal.
Imágenes de la escena muestran grafitis en el edificio, muebles bloqueando las puertas y carros de golf, mesas de picnic y sombrillas volcados y obstruyendo la plaza frente al edificio.