Frente a las oficinas de Glencore Coal en Sandton, Johannesburgo, manifestantes antiisraelíes se congregaron para demandar que la empresa termine sus relaciones económicas con Israel en medio de la guerra en Gaza.
La protesta fue organizada por una coalición de grupos propalestinos y defensores del clima. Los manifestantes portaban pancartas con mensajes como “Desconecten el apartheid de Israel” y “No a alimentar la maquinaria de guerra de Israel”.
El gobierno de Sudáfrica rompió relaciones diplomáticas con Israel tras el ataque terrorista perpetrado por Hamás el 7 de octubre, el cual desencadenó la actual guerra en Gaza.
En marzo, Naledi Pandor, ministra de Asuntos Exteriores de Sudáfrica, advirtió que cualquier ciudadano sudafricano que preste servicio en las Fuerzas de Defensa de Israel será arrestado al regresar al país.
Además, en diciembre, Sudáfrica presentó una demanda ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) contra Israel, acusándolo de genocidio en la Franja de Gaza. Aunque la CIJ ha ordenado a Israel tomar medidas para evitar violaciones de la Convención sobre el Genocidio de 1948, no ha exigido que Israel continúe su ofensiva en Gaza.