Lalela Mswane, Miss Sudáfrica, que quedó entre las tres primeras del concurso de Miss Universo esta semana, dijo que recibió “amenazas de muerte” que la dejaron totalmente “desesperada” después de volar a Israel, a pesar de las tácticas de intimidación tanto de activistas antiisraelíes como de su propio gobierno.
Como informó Breitbart News, Mswane ganó el título de segunda finalista en la ciudad turística de Eilat, compitiendo junto a varias concursantes de países árabes en un día en que el primer ministro de Israel realizó una visita histórica a los Emiratos Árabes Unidos.
Este mensaje de paz y unidad contrastó con los esfuerzos de los activistas sudafricanos antiisraelíes del movimiento de “boicot, desinversión y sanciones” (BDS) para presionar a Mswane a fin de que boicoteara el concurso por celebrarse en el Estado judío.
Mswane incluso desafió al gobierno sudafricano, que cedió al BDS y retiró su apoyo a su candidatura, alegando las “atrocidades” israelíes contra los palestinos.
En declaraciones a los periodistas tras su regreso a casa, la voz de Mswane se quebró de emoción cuando se le preguntó cómo había respondido a la condena del gobierno a su decisión de participar en el concurso.
“Me sentí abandonada. También sentí un poco de rabia porque no sé qué había hecho tan mal”, dijo.
“Nunca comprenderé qué hice para que la gente se sintiera justificada en sus acciones. No hay que estar a favor de mí, pero tampoco en contra. No tienes que, ciertamente, desearme la muerte porque tomé una decisión. Nunca inicié ninguna guerra. Esto es mucho más grande que yo. Todo lo que hice fue perseguir un sueño mío”.
“A veces, me pregunto si ir fue incluso la elección correcta. Simplemente porque cuando tomé esa decisión, ya no se trataba de mí, sino de la seguridad de mi familia y de mis seres queridos. Y recibir amenazas de muerte, no poder dormir, creo que ni siquiera me preparé para esta competición, así que para mí, ser tercera es la mayor victoria que podría haber conseguido, y estoy extremadamente orgullosa de mí misma”, dijo al pequeño grupo de medios de comunicación que se reunieron en la conferencia.
Según el sitio de noticias sudafricano The Citizen, Mswane también criticó al gobierno por tener un doble rasero y les retó a cortar todos los lazos con Israel si están tan en contra de lo que el gobierno del país está haciendo al pueblo palestino.
“Me sentí bien, me sentí justificado al hacer lo que hice. Porque, ¿saben qué? Si el gobierno hubiera dicho ‘ja, hemos liberado todos los lazos con Israel’, es una postura totalmente diferente, pero creo que es hipócrita pedirme entonces que haga algo. Como he dicho, creo que era un blanco fácil, era una fruta fácil y mi participación no es en absoluto una indicación de apoyo a ningún Estado”.
Las organizaciones judías sudafricanas han alabado la valentía de Mswane, y algunos críticos con el gobierno le piden que se disculpe.