Un juez federal ha ordenado a la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) desarrollar un plan para proteger a los estudiantes judíos, luego de que se produjeran protestas propalestinas y antiisraelíes en el campus. La orden se emitió el lunes, meses después de que tres estudiantes judíos presentaran una demanda en junio, alegando discriminación durante las manifestaciones contra la guerra entre Israel y Hamás.
Yitzchok Frankel, un estudiante de derecho en UCLA, explicó en la demanda que rechazó una invitación para organizar un almuerzo con el director de vida estudiantil debido a preocupaciones de seguridad. Frankel manifestó que normalmente habría aprovechado la oportunidad de participar, pero consideraba que la universidad no ofrecía un entorno seguro para los estudiantes judíos. Subrayó la importancia de sentirse orgulloso de su identidad judía y de guiar a otros estudiantes para que también lo hicieran.
Por su parte, Mary Osako, portavoz de UCLA, afirmó que la institución está “comprometida a mantener un campus seguro e inclusivo, responsabilizando a quienes cometen actos de violencia y combatiendo el antisemitismo en todas sus formas”. Añadió que la universidad ha aprendido de los eventos ocurridos en primavera y sigue trabajando para garantizar un ambiente donde todos se sientan bienvenidos y libres de intimidación.
Se ha solicitado a la universidad que presente un plan detallado el próximo mes para abordar estas preocupaciones.
Las protestas en UCLA forman parte de un movimiento más amplio en las universidades de todo el país en respuesta a la guerra entre Israel y Hamás. En mayo, las autoridades ordenaron a más de mil manifestantes desmantelar un campamento en el campus debido al aumento de tensiones, donde los contramanifestantes atacaron el campamento, resultando al menos 15 personas heridas. En junio, varios manifestantes fueron arrestados al intentar reinstalar el campamento.