La policía británica detuvo al líder de Greenpeace en el Reino Unido y a cinco activistas más por verter 300 litros de tinte rojo sangre en un estanque de la embajada de Estados Unidos. La acción se llevó a cabo en protesta contra el suministro de armas estadounidenses a Israel.
Según Greenpeace, Will McCallum, director de la campaña ambiental, y otros activistas se disfrazaron de repartidores en bicicletas con remolques antes de verter el tinte en el estanque semicircular de alta seguridad de la embajada.
Los detenidos enfrentan cargos por conspiración para causar daños criminales, lo que podría provocar hasta 10 años de prisión.
Areeba Hamid, codirectora ejecutiva de Greenpeace, explicó que la protesta se realizó debido a que las armas de EE. UU. siguen alimentando una guerra que ha devastado vidas palestinas, con bombas cayendo sobre escuelas, hospitales y barrios enteros destruidos.