Los aficionados israelíes al fútbol vivieron momentos de terror el jueves, cuando turbas de alborotadores antisemitas atacaron y golpearon a los seguidores del Maccabi Tel Aviv.
La policía de Ámsterdam fue acusada de no intervenir durante los enfrentamientos, que se describieron como un “pogromo del siglo XXI”. Las víctimas relataron que los agresores, mayoritariamente musulmanes y árabes locales, los atacaron sin piedad, y muchos israelíes se vieron obligados a refugiarse en sus hoteles. Los ataques se produjeron en la víspera de un partido contra el Ajax, y al menos 10 personas resultaron heridas durante las violentas horas de la noche.
El número de personas afectadas por los disturbios es considerable, con 62 personas arrestadas y cinco hospitalizadas, según reportaron las autoridades de la ciudad. Las víctimas del ataque, que eran principalmente aficionados del Maccabi Tel Aviv, se vieron atrapadas en medio del caos, con muchos temiendo nuevos ataques cuando intentaban regresar a sus vuelos. Las autoridades israelíes aseguraron que todos los afectados fueron contabilizados, aunque se había rumoreado sobre posibles rehenes.
El ataque fue cuidadosamente planeado
Aviv y Harel, dos aficionados del Maccabi Tel Aviv, narraron a la emisora pública Kan que durante los disturbios la policía permaneció inactiva, observando sin intervenir mientras los manifestantes se desataban.
“Todo estaba planeado hasta el último detalle”, dijeron los testigos. Añadieron que, en medio de los enfrentamientos, vieron a personas tiradas en el suelo y golpeadas por los agresores. El miedo se apoderó de los israelíes, que intentaron ocultarse para evitar ser identificados.
Imágenes difundidas en las redes sociales mostraron a los agresores atacando a los aficionados del Maccabi Tel Aviv después del partido. Los testimonios coinciden al describir un escenario de violencia brutal, que se intensificó a medida que los atacantes rodeaban a las víctimas. Según los relatos de los testigos, la policía no actuó hasta que un grupo de israelíes, más tarde en la noche, logró expulsar a los alborotadores.
“La policía nos abandonó”, afirmó Dan Kopleh, un testigo de los hechos, quien destacó que la situación solo se calmó una hora y media antes del evento cuando los agresores fueron finalmente alejados.
Agresión antisemita en Ámsterdam: nuevos relatos
Las imágenes transmitidas por la televisión israelí mostraron la brutalidad de los ataques ocurridos en Ámsterdam, donde un agresor le preguntó a un israelí su lugar de origen, para atacarlo inmediatamente después mientras gritaba “Palestina libre”.
Amit Amira, aficionado del Maccabi Tel Aviv, recordó cómo, al ser abordado por tres personas en la calle, se vio forzado a mentir sobre su nacionalidad para evitar un ataque. “Nos quedamos sin ayuda en la entrada del casino, hasta que un árabe israelí nos auxilió y nos ayudó a escapar en taxis”, relató.
Nir, un aficionado de 39 años, estaba con su padre cuando presenció cómo tres personas fueron atropelladas por un vehículo. “Vimos cómo los aficionados se levantaban después del atropello, pero pronto nos rodearon seis o siete agresores.
Le pedí a mi padre que se diera la vuelta rápidamente”, detalló Nir. Dan, otro testigo, describió los incidentes con gran angustia: “Vi cómo un coche embestía a los aficionados y cómo los golpeaban. Fue un pogromo. Si hubiera habido Internet en 1938, así habría sido la Noche de los Cristales Rotos”, aseguró.
La policía intervino tarde mientras los aficionados sufrían el ataque
Ami Shuman, fotógrafo de Israel Hayom, vivió en carne propia la violencia mientras se encontraba en la Plaza Dam con su hijo. Quedaron atrapados junto con otros aficionados, hasta que la policía los rodeó y los transportó a varios hoteles en furgonetas policiales.
“Vimos personas con los ojos morados y heridas graves. La policía nos llevó a un restaurante KFC hasta que la situación empeoró”, narró Shuman. “Algunos aficionados comentaron que los taxistas también participaron en los linchamientos, llevándolos a calles laterales para golpearlos”, añadió.
En declaraciones al Canal 12, dos israelíes que lograron escapar de los agresores en Ámsterdam aseguraron que la policía les ordenó abandonar el área y les advirtió de no tomar un taxi. Tomer Talias, aficionado del Maccabi Tel Aviv, relató su experiencia a su regreso a Israel, destacando que los aficionados se salvaron por su propia cuenta y no por la intervención de las fuerzas del orden.
“Los atacantes estaban organizados como un grupo terrorista, esperándonos en cada rincón con palos y cuchillos, con los rostros cubiertos y banderas palestinas”, aseguró Talias, quien recalcó que no hubo distinción en los ataques, que alcanzaron a mujeres, hombres, niños y ancianos.
Violencia premeditada contra israelíes en Ámsterdam
Según testigos, los agresores no dudaron en atacar a los israelíes que se encontraban en la ciudad, incluso antes del partido de fútbol. Oren y Or, dos israelíes que salieron de Ámsterdam el viernes, relataron que fueron golpeados por bandas árabes un día antes del encuentro.
A pesar de denunciar el ataque a la policía local, no se tomaron medidas al respecto. Este patrón de inacción de las autoridades fue corroborado por otro testimonio, el de Gal, quien sufrió una brutal golpiza. Gal, quien se encontraba en Londres al momento de su entrevista, explicó que una banda de entre ocho y diez personas lo golpeó, rompiéndole dos dientes
“Me desperté en una ambulancia cubierto de sangre”, dijo, señalando que lo encontraron en un charco de sangre tras el ataque.
La violencia se extiende mientras las autoridades no actúan
Los relatos de los atacados se suman a una creciente preocupación sobre la incapacidad de la policía de Ámsterdam para proteger a los israelíes en la ciudad. Las víctimas denunciaron que los agresores actuaron de forma organizada y sin temor a represalias.
Además, se destacó el miedo que persiguió a los afectados durante su estadía en la ciudad, ya que los ataques fueron continuos y las autoridades parecían desbordadas por la situación.